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El «aparatick» nunca pierde por José Clemente
Atan sólo tres días de que el PSRM-PSOE desvele en su XIV congreso federal quién será el «deus ex machina» que tomará el relevo en esa larga travesía del desierto en la que viven anclados desde hace ya 17 años, los socialistas aparecen más divididos y enfrentados que nunca, una fragmentación que se agudiza con la derrota electoral de María González Veracruz frente a Valcárcel hace diez meses y que se ve confirmada a nivel nacional con el nuevo choque que protagonizan Rubalcaba y Rajoy el 20-N. Nada de lo ocurrido entonces y demandado de forma clamorosa por las bases (aperturismo del partido; mayor transparencia; renovación de líderes; programa electoral más con los pies en el suelo que no en los intereses de sus dirigentes; desapego al poder por el poder; menor influencia de los territorios y mayor democracia interna...), parece haber alterado los planes del «aparatick» socialista, un asunto que suele darse y con bastante frecuencia en los partidos de izquierda, que tienden a perpetuarse en el poder incluso al precio que sea. Lo vimos en Sevilla entre Rubalcaba y Chacón y lo volveremos a ver en Murcia entre González Tovar y el resto de candidatos, cuya fragmentación no beneficia las escasas posibilidades con las que parten. Sólo la renuncia de Joaquín López a favor de Roberto García o la de éste último a favor del primero daría opciones a vencer al aparato que representa González Tovar. Una fragmentación que algunos piensan que puede estar propiciada por el propio ex delegado del Gobierno con el apoyo y consejo de Rubalcaba, pero que sólo contaría con opciones de triunfo si vence la tesis de Ramón Ortiz de unirles en la verdadera renovación. Alea jacta est.
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