El Gobierno salva el paro de mayo en Estados Unidos

NUEVA YORK- Estados Unidos creó empleo el pasado mes de mayo al mayor ritmo de los últimos diez años gracias en buena parte a las contrataciones temporales que la Administración que dirige Barack Obama hizo para llevar a cabo el censo de 2010. Según los datos ofrecidos ayer por el Departamento de Trabajo estadounidense, la economía del país creó 431.000 el pasado mes, lo que permitió reducir dos décimas el índice de paro, hasta el 9,7%.

Los datos fueron peores de lo anticipado por los analistas, que, aun tomando en cuenta que las empresas serían más renuentes a contratar en mayo ante la inestabilidad en los mercados por los problemas de deuda que arrastran varios países europeos como España, creían que las plantillas estadounidenses crecerían en unos 540.000 nuevos puestos. El propio Obama admitió que la mejora en estos datos responde en gran medida a los 411.000 contratos temporales firmados para realizar el censo, mientras que el sector privado, el músculo de la economía estadounidense, sólo generó 41.000 nuevos trabajos.

 Tampoco la rebaja en dos décimas de la tasa del desempleo puede interpretarse como un avance económico, pues se debió, en gran medida, a que 322.000 personas abandonaron el mercado laboral.

Al contrario que Wall Street, Barack Obama acogió los datos de forma positiva y subrayó que mayo ha vuelto a ser «otro mes de creación de empleo en el sector privado». En un acto en una fábrica de Hyatsville (Maryland), al que acudió acompañado del vicepresidente, Joe Biden, Obama agregó con optimismo que «el informe constituye una prueba de que nuestra economía se está fortaleciendo».

Del mismo modo, Christina Romer, presidenta del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, recalcó que con los avances de mayo los empleos en el sector privado han aumentado en casi medio millón de trabajadores desde diciembre de 2009.

Pero entre tanto optimismo de los dirigentes del país, la Asociación de Dirigentes de la Industria de Ventas Minoristas recibió el informe como un jarro de agua fría. «Ésta es una noticia negativa para sectores como las ventas minoristas, que dependen mucho del sentimiento de los consumidores estadounidenses. La inestabilidad laboral es el mayor impedimento para la confianza de los consumidores», dijo la presidenta de la asociación, Sandy Kennedy.