El ocaso de la BBC

Perdida, desorientada, sin rumbo y sin tan siquiera un responsable para llevar el timón. La BBC nunca había ofrecido una imagen similar. Pero está dispuesta a hacer lo que sea para recuperar, y rápido, la confianza del ciudadano. Éste fue el mensaje principal que quiso transmitir ayer Chris Patten cuando se le preguntó por la peor crisis que atraviesa la cadena pública en sus 90 años de historia. El responsable de BBC Trust, el consejo administrador, no tuvo más remedio que reconocer que si no se lleva a cabo una «profunda reestructuración», la televisión que en su día alcanzó reputación a nivel mundial por su veracidad y rigor tiene los días contados.

Su intervención tuvo lugar apenas unas horas después de que el director general, George Entwistle, presentase su dimisión 54 días después de aceptar el cargo debido a la polémica generada por «Newsnight». El mismo programa que no quiso revelar los abusos sexuales cometidos por el presentador estrella de la década de los 80, Jimmy Savile, ha sido el responsable de emitir un especial en el que se acusaba erróneamente a un asesor de Magaret Thacher de acosar sexualmente a los niños de un internado de Gales en los 70. Su presentador, el carismático Jeremy Paxman, se mostró indignado por la salida de Entwist. «Ha sido humillado por una panda de cobardes e incompetentes», dijo. «Es una lástima que un hombre de talento tenga que ser sacrificado mientras otros sirvientes prosperaran».

Un periodismo «turbio»
Al margen de las reacciones en el seno de la pública, la gran crisis que atraviesa está teniendo también un gran impacto en la calle. Todas las principales cabeceras del país llevaron ayer en su portada el escándalo y los británicos se sienten indignados con la pública, que alimenta gran parte de su presupuesto con el canon que pagan cada año los contribuyentes. Asimismo, las privadas, que nunca habían gozado de una oportunidad como esta para desprestigiar a la BBC, también analizan cada detalle del polémico documental. El mismo Patten, antiguo político conservador y último gobernador de la ex colonia británica de Hong Kong, calificó de «turbio» el tipo de periodismo que se siguió en «Newsnight» debido a la falta de rigor en la investigación del caso.

El programa nunca llegó a mencionar directamente el nombre de Lord McAlpine, pero no hizo falta. Steve Messham, una de las víctimas de los abusos de los centros de menores del norte de Gales, ofreció una entrevista con toda clase de detalles sobre una personalidad tory muy influyente en los 80 y las redes sociales se encargaron de hacer el resto.

En Westminster no se hablaba de otra cosa. En las calles tampoco, pero luego resultó que todo había sido un error y que la persona que identificó la víctima en una fotografía que le enseñó la Policía a principios de los 90 no se correspondía con el Lord.

El presidente del consejo administrador confió en tener «en unas semanas» a un nuevo director general, cuya labor será ejercida de manera provisional por Tim Davie, actual director de audio y Patten se mostró a favor de que se siga haciendo periodismo de investigación, pero dejó claro que hay que recuperar el «control» a la hora de su preparación para evitar que se repita un caso como este.

¿La primera mujer directora?
Entre los candidatos a la sucesión de Entwistle y a liderar la remodelación de la BBC, casi todas las apuestas apuntan a Caroline Thomson (en la imagen). Se trataría de la primera mujer en ocupar el cargo de directora general en la historia de la cadena, aunque su nombre ya sonó con fuerza en septiembre, cuando comeptía con Entwistle por la dirección. Tras la derrota, explicó en una entrevista que a la BBC aún le quedaba mucho tiempo para deshacerse del sexismo que muchas veces ha criticado.