Asia

Pekín

El comunismo en familia

En su primera reunión plenaria de los últimos 30 años, el Partido de los Trabajadores de Corea del Norte dejó ayer el camino preparado para consumar la sucesión del «Querido Líder» Kim Jong Il.

Kim Jong-il organiza su sucesión
Kim Jong-il organiza su sucesiónlarazon

El extravagante comunismo hereditario norcoreano parece haberse decantado por el tercer hijo reconocido de dictador: Kim Jong Un, un joven del que ni siquiera se sabe la fecha de nacimiento, aunque se cree que ronda los 27 años. Se trataría del tercer miembro de la estirpe que toma las riendas de la tiranía, instaurada hace más de sesenta años por el «abuelo» Kim Il Sung, conocido por sus súbditos como el «Gran Líder». Entre la herencia que se encontrará el inexperto sucesor se cuenta un programa de desarrollo de armas atómicas y la agenda de enemistades diplomáticas más larga del mundo. También asumirá el mando sobre una de las naciones más pobres de Asia, con graves problemas para alimentar a su población.

Hace meses que se viene especulando con la idea de que Kim Jong Un será el elegido, pero hasta ahora su nombre nunca se había mencionado en ningún documento oficial. La agencia norcoreana lo hizo ayer, anunciando que el vástago acababa de ser ascendido a general de cuatro estrellas y haciendo coincidir la noticia con la apertura de la reunión del Partido en la que, según la propia propaganda, se estaba definiendo el porvenir de la revolución coreana. Lo que puede parecer un mensaje retorcido o ambiguo, resulta rotundo en un régimen tan hermético como Corea del Norte, donde la política se hace a través de gestos. Además, sigue el patrón utilizado hace medio siglo por Kim Il Sung para dejar a su hijo al mando. Con una diferencia: esta vez el proceso va mucho más deprisa. Según la opinión unánime de los analistas, resolver el asunto urge porque el dictador, a sus 68 años y con graves problemas de salud, duda de su propia capacidad para mantenerse en el cargo durante mucho tiempo más.

Para asegurarse de que todo queda en familia cuando desaparezca o quede inhabilitado, Kim Jong Il también acaba de conceder un generalato de cuatro estrellas a su hermana, Kim Kyonung Hui, cuatro años más joven y casada con el número dos del régimen, Jang Song Thaek. Los analistas esperan que, llegado el caso, ambos orquestarán la «coronación» de su sobrino y actuarán como regentes, o al menos como consejeros. Eso sí: parece que mientras pueda sostener las riendas, Kim Jong Il lo hará. Ayer, el Partido lo reeligió como secretario general.