Noticias que dan tranquilidad

Mucha tranquilidad es lo que me ha dado leer que Shakira ya chapurrea el catalán, cosa que llena de gozo a España y a la humanidad. Ya se sabe que cuando se pone pasión en lo oral, la lengua termina triunfando. Lo de «fornicator», me refiero al ex macizo Arnold Schwarzenegger, es tremendo. Resulta que no sólo compartía con su esposa y en la misma casa a una criada respondona, con andares de legionario de Millán Astral, ahora resulta que empiezan a salir distintas señoritas, más bien pericos verbeneros, que afirman haber tenido relaciones íntimas con «Terminator», a partir de ahora «Fornicator». Les voy a contar una historia de los comienzos del fornido ex gobernador de California. En los años 60, un poderoso empresario, muy conocido en los medios artísticos, organizaba como hobby concursos de culturistas. Conoció a Schwarzenegger en su Austria natal y se lo trajo una temporada a Madrid. Le montó un concurso que, naturalmente, ganó. El empresario lo podía hacer gracias a sus buenas relaciones, ya que el Régimen consideraba que esto de los culturistas era una forma encubierta de mariconeo. Fue madrina del acto la gran estrella Paquita Rico y en el jurado estaba, entre otros, Jaime Peñafiel. Ya ven cómo fueron los comienzos de este astro a punto de fundirse en negro. Hay verdades inalterables, como que las madres hacen cualquier cosa por sus hijos. Esto es lo que le ha ocurrido a Isabel Pantoja. Juró, y es sabido que Isabel cuando jura es que jura de verdad, que jamás aparecería de ningún modo por Telecinco. El jueves entró por teléfono en el programa «Supervivientes» para apoyar a su hijo Kiko. Como dice la estrella de la cadena, Belén Esteban, yo por mi hijo mato.