Nueva York

Barak se responsabiliza del asalto a la flotilla

El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, asumió ayer, en su testimonio ante la comisión independiente que investiga el asalto a los buques turcos que desafiaron la restricción marítima sobre Gaza, «toda la responsabilidad» de la orden dada al Ejército para detener en alta mar a la flotilla de Hamas, que calificó de «provocación planificada bajo pretextos humanitarios».

Barak asume toda la responsabilidad del asalto a la flota de Gaza
Barak asume toda la responsabilidad del asalto a la flota de Gazalarazon

No obstante, aclaró ante el panel de expertos que dirige el juez Turkel que, si bien el Gobierno dio la orden de detener los barcos, el Ejército fue el responsable último del resultado de la acción: «El escalafón político decide qué tiene que hacerse y asume la responsabilidad. El escalafón militar decide cómo llevarlo a cabo, y asume la responsabilidad», dijo.

De esta forma, Barak pasa el testigo de la responsabilidad (murieron nueve activistas) al Ejército, pero afronta la competencia política sobre la operación militar que el primer ministro se negó a asumir. Netanyahu explicó el lunes a la comisión que «delegó» las responsabilidades en su ministro de Defensa porque él tenía un compromiso importante con Barak Obama en Washington.

En su testimonio ante la comisión, Barak contradijo la versión del primer ministro cuando afirmó que las consecuencias de un asalto violento sí se trataron en la reunión del «foro de los siete» ministros celebrada cinco días antes del incidente. «Fue una decisión razonada tomada por todos», dijo, y añadió que en el citado encuentro se valoraron la información de inteligencia disponible y los posibles resultados de la operación, incluyendo «escenarios extremos».
Netanyahu explicó que en dicho encuentro sólo se abordó el posible impacto mediático anti-israelí que podría tener la toma por la fuerza de la embarcación.

La actitud de Netanyahu ante la comisión ha despertado un aluvión de críticas en Israel. Su testimonio, que ha sido calificado de «catastrófico» por la «falta de liderazgo» por parte de la Prensa local, tuvo que ser corregido en varios puntos por sus asesores: «Como primer ministro, la responsabilidad global siempre recae sobre mí, esté en Israel o en el extranjero. También en este incidente», rectificó horas más tarde.

Hoy prestará su testimonio a la comisión el jefe del Ejército, Gabi Ashkenazi. Mientras, ayer en Nueva York se reunía por primera vez el panel de la ONU que investiga el mismo incidente.