FIFA

Más problemas para Ingla

Node Partners, fundada por el precandidato y Ferran Soriano, su hombre de confianza, suspende pagos

MARC INGLA (dcha.) aspira a presidir el Barça y tiene en su amigo Soriano a uno de sus hombres fuertes y responsable del área económica
MARC INGLA (dcha.) aspira a presidir el Barça y tiene en su amigo Soriano a uno de sus hombres fuertes y responsable del área económicalarazon

BARCELONA- La precampaña electoral del Barcelona está dando mucho que hablar. Los proyectos y promesas de los precandidatos están quedando en un segundo plano ante los aspectos ajenos al proceso que están saliendo a la luz. El último vuelve a afectar a la precandidatura de Marc Ingla y, especialmente, a su hombre fuerte, Ferran Soriano, que sería el máximo responsable de las finanzas del Barça en caso de salir ganador en las urnas.Ingla y Soriano, que fueron vicepresidentes durante cinco años bajo el mandato de Joan Laporta, fundaron hace tiempo la empresa Node Partners, especializada en servicios de consultoría en el cam- po de la innovación, y ahora Node se ha visto obligada a presentar un concurso voluntario de acreedores, lo que antes se conocía como suspensión de pagos, ante las ten- siones de tesorería provocadas por la morosidad de uno de sus clientes, según informó el diario «Expansión».Se da la circunstancia de que Ferran Soriano, el experto en el área de economía de la precandidatura de Marc Ingla y actual pre- sidente de Spanair, era el máximo mandatario de Node Partners hasta el pasado verano, cargo que compaginó unas semanas con el de la compañía aérea. En 2009, la empresa registró una cifra de negocio de 3,9 millones de euros, 0,6 menos que el ejercicio anterior.Node ha declarado en los juzgados mercantiles de Barcelona un pasivo exigible de 1,3 millones de euros, aunque la compañía asegura que tiene fondos propios positivos y que está en beneficios. Fuentes cercanas a Node declararon a «Expansión» que la situación se ha precipitado por el retraso en el pago de una factura por parte de un cliente de Arabia Saudí, cuyo impago ascendería a unos 900.000 euros.Ésta asunto se une a la polémica que destapó LA RAZÓN respecto a la propuesta de Marc Ingla de repartir beneficios entre los socios «culés». Una decisión que convertiría al Barcelona en una entidad con ánimo de lucro y que le obligaría a un cambio radical de fiscalidad.