Simenon regresa a las librerías

BARCELONA-El próximo septiembre la obra de Georges Simenon volverá a tomar las librerías. Desde hace unos meses, los dos sellos que dirige Jaume Vallcorba –Acantilado y Quaderns Crema– tienen los derechos de la copiosa producción de Simenon en castellano y en catalán. Vallcorba por el momento no quiere revelar cómo será la nueva andadura del escritor belga, una labor editorial que no es fácil al tratarse de un legado formado por más de 200 títulos, entre novelas, autobiografías, artículos, ensayos y, sobre todo, la serie que dedicó al comisario Maigret. Este será un nuevo intento de dar a conocer al autor en nuestro país, una historia editorial en la que se mezclan los éxitos con los fracasos.

El escritor y editor Ferran Canyameres fue el primero en asumir el riesgo de dar a conocer la literatura de Simenon en una ambiciosa propuesta nacida en el exilio. El profesor Xavier Pla es quien mejor ha analizado los problemas con los que se encontró Canyameres en su libro «Simenon i la conexió catalana». En su libro apunta a Gasch, Tasis y Cabot como los inductores intelectuales del paso dado por Canyameres, quien se atrevió a escribir al novelista por primera vez el 8 de febrero de 1942. El catalán conoció personalmente a Simenon en algunos de sus numerosos domicilios, creándose una amistad entre los dos. El contrato entre las dos partes se firmó el 6 de marzo de 1942, pero Canyameres no empezó la publicación de las novelas hasta diciembre de 1948, en la editorial Aymà, con unas magníficas cubiertas diseñadas por Ricard Giralt Miracle. El editor asumía la labor de traducción de los libros, aunque contó con la colaboración anónima de algunos de sus amigos, como Sebastià Gasch. Sin embargo, pese a los muchos esfuerzos, las ventas no acompañaron y Simenon en alguna carta se quejaba de lo poco recibido económicamente.

Otra iniciativa editorial interesante fue la publicación de su (casi) obra completa en Aguilar, además de novelas sueltas en sellos como Noguer y Luis de Caralt. En 1993, Tusquets tomó el reto de divulgar parte de los trabajos del padre de Maigret, una tarea que han mantenido hasta fecha reciente, con la excepción de los dos tomos de sus memorias, aparecidas en 1989 en Ediciones B.