Error de concepto de Ruiz-Gallardón

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha concedido una interesante entrevista a LA RAZÓN en la que insiste en atribuir a cuestiones meramente salariales sus diferencias con todas las asociaciones de jueces y fiscales, afirmando que los profesionales de la Magistratura se oponen a que se les considere como al resto de los funcionarios. Comete el ministro un error. La causa del deferendo es mucho más profunda y responde a criterios profesionales. Es un enfrentamiento que, además, causa un flaco favor al Gobierno al que pertenece.

Extraño pudor en las autonomías endeudadas
Tras el recurso del Gobierno autónomo valenciano al fondo de liquidez, se da por descontado que otras comunidades darán el mismo paso para evitar financiarse en el mercado con intereses de usura. Extraña, sin embargo, que algo tan razonable en política financiera sea visto por los portavoces autonómicos como una especie de estigma, cuando todos los ciudadanos están al cabo de la calle de la difícil situación que atraviesan. Parece un ataque de pudor, pero a destiempo.

Una decisión judicial difícil de entender
La Audiencia Nacional dejó ayer en libertad bajo fianza de 10.000 euros a dos de los cuatro grapos detenidos por el secuestro de Publio Cordón. Decisiones judiciales de este tenor no dejan de ser sorprendentes y causan en la ciudadanía una comprensible perplejidad. Máxime cuando se recuerda que el cadáver de Cordón sigue sin encontrarse y los detenidos son los únicos capaces de arrojar luz sobre el lugar de su inhumación. Está en juego la tranquilidad de una familia que ha sufrido lo indecible.