Los Ángeles

El irreverente Gervais se defiende: «Acabé de copas con Allen y Hanks»

Ha abierto la caja de los truenos con sus irreverentes bromas y comentarios en la gala de Globos de Oro y parece no importarle. Es un terreno donde un provocador nato como él se siente cómodo. De hecho, Ricky Gervais no duda en defender sus chistes y dice que ninguna celebrity se enfadó con él. 

El humorista asegura que volvería a mirar a los ojos a las estrellas objeto de sus burlas y de nuevo haría los mismos chistes. Además, dice que nadie se enfadó y que protagonistas como Tom Hanks o Tim Allen (con quien está en la foto), que le reprocharon sobre el escenario de la gala su poco humor y falta de tacto, acabaron tomándose unas copas con él en la fiesta posterior a la ceremonia.

"Disfruté más de los Globos este año. Creo que mis gags eran mejores. Más que las líneas sobre Mel Gibson del año pasado", afirma Gervais en su blog donde hace un pormenorizado análisis de las acusaciones recibidas tras su ya célebre actuación como maestro de ceremonias.

Tras desmentir los rumores que apuntaban que los organizadores le retuvieron durante una hora de la gala para que no volviera a escena son totalmente e insistir en que fue él mismo quien eligió los personajes que presentaría para hacer los mejores chistes, señaló que la polvareda levantada es la misma "que la última vez".

"Están en su derecho de decir lo que odian" 
"Dijeron 'Paul McCartney estaba furioso'... y no, no lo estaba. Igual que tampoco lo estaban este año Tim Allen y Tom Hanks. Estuve bebiendo con ellos después", dice el cómico que se pregunta por qué los asistentes a la gala tienen que limitarse a "adornar". "Están en su derecho de decir lo que odian. Están en su derecho para decir qué cosas no les hacen gracia y cuales son de mal gusto. ¿Pero por qué especular y sacar las cosas de quicio?", denuncia.

Pero "no os preocupéis"por que el propio Gervais nos da la respuesta: "Porque vende mucho más que decir 'la cosa fue bien, unos cuantos ganaron unos premios y luego se fueron de fiesta'. Pero justo esto último es todo lo que sucedió".

Y para dar carnaza a los que quieren saber qué pasó en realidad en la trastienda de los Globos de Oro Gervais no duda en dejar de lado lo más "aburrido"y echar a volar su imaginación: "Aquí está lo que realmente sucedió. Bruce Willis y Sly Stallone comenzaron una pelea conmigo, pero Alec Baldwin y Mark Walberg se metieron por medio y me ayudaron a escapar. Eso es lo que pasó".