Los indignados admiten problemas de salubridad y seguridad

Barcelona- La asamblea organizada ayer por la noche por los indignados acampados en plaza de Catalunya abordó tres documentos claves para el avance del movimiento del 15-M. En éstos, diferentes comisiones dejaban claro que el asentamiento en pleno centro de la ciudad está desgastando a la gente y puede conllevar problemas sanitarios y de seguridad por lo que debería plantearse el desalojo.
¿Seguir durmiendo en la plaza o no? Los documentos debatidos en asamblea dejaron clara la idea de que el enclave no debe ser totalmente desalojado, sino que las «dinámicas deben ser reconducidas» y transformar la plaza barcelonesa en el «símbolo de la revolución» descentralizándo la actividad, a la vez, a otras plazas. Entre las propuestas, también se consideró la posibilidad de buscar espacios complementarios exigiendo al Ayuntamiento a la cesión de un local donde seguir organizándose. De recibir una negativa, se barajaron opciones para encontrar dónde ir.
Al cierre de esta edición, no habían decidido si desmantelaban el campamento de plaza Catalunya. Los que sí manifestaron su intención de abandonar su punto de reunión fueron los acampados en el centro de Lleida.