Carla Bruni-Sarkozy @MmeSarkozy / François Hollande @fhollande

Carla Bruni-Sarkozy @MmeSarkozy
La primera dama francesa no sigue a su esposo
Ni a su partido, ni a @Elysee, ni a nada parecido. En realidad, tampoco importa demasiado, porque @MmeSarkozy no dice ni pío desde febrero de 2009, a pesar de que se tomó la molestia de pedir y conseguir que Twitter le autentificara la cuenta. Aires de grandeza, porque en todo este tiempo sólo ha escrito tres tuits que no darían ni para una de sus caciones. «Bien sûr chéri...» («por supuesto, querido») en respuesta al fake @MrSarkozy, ya suspendido; «impossible...», a @iStylesMK; y «...peut-être...» («puede ser»), a @gwencuny. Desde luego, si finalmente @NicolasSarkozy gana las elecciones, no será por el entusiasmo tuitero de su esposa.

El clon
@_Carla_Bruni
Hace la maleta
Da por perdidas las elecciones, y por eso pregunta a su «bichon» si puede reservar ya las vacaciones. Antes, preparará un choucroute para Le Pen, «tu nueva novia». En la llaga.

François Hollande @fhollande
La «gauche caviar» va a por Merkel
Acierta cuando afirma que son unas presidenciales «europeas». @NicolasSarkozy se las ha pasado hablando (mal) de España, mientras el socialista prefiere tuitear contra Alemania, a donde irá «para confirmar el voto de los franceses por otra Europa». Como si Merkel fuera la Junta Electoral. Con la campaña, se pone grandilocuente («tenemos que dar a Francia un sucesor de Miterrand») y chorrea demagogia («¿Qué preferimos? Proteger a los ricos o proteger a nuestros hijos?»). Tampoco hace ascos a los votos ultra («¡Todos son bienvenidos!»), y pone de ejemplo a EE UU. Cosas de la «gauche caviar».

El clon
@FrancoisHolland
Kilos de más
El fake se ríe de la lucha del original contra el sobrepeso: «Manché mi voto de grasa», dice tras anunciar que «suprimiré la palabra» colesterol malo «de nuestra Constitución». Más falsas promesas.