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Chacón ofrece más medios en Libia

España estaría «plenamente dispuesta» a participar en una misión humanitaria en Libia siempre y cuando la ONU se lo pidiese a la Unión Europea. Eso es lo que dijo ayer la ministra de Defensa, Carme Chacón, al ser preguntada sobre una posible presencia de tropas españolas sobre el terreno.

Un combatiente rebelde libio junto a los restos de un tanque entre Brega y Ajdabiya
Un combatiente rebelde libio junto a los restos de un tanque entre Brega y Ajdabiyalarazon

 La UE dispone de un presupuesto de 7,9 millones de euros para esta misión, que tendría un periodo de ejecución de cuatro meses y estaría al mando del almirante italiano Claudio Gaudioso. Uno de los objetivos de esta operación es establecer un corredor humanitario hasta la ciudad de Misrata, cercada desde hace seis semanas por las fuerzas de Gadafi.
La jefa de la Diplomacia europea, Catherine Ashton, aseguró ayer tras el Consejo de Exteriores celebrado en Luxemburgo, que la UE permanece a la espera de ser solicitada por Naciones Unidas.

Aunque se desconocen los detalles de la operación, Ashton indicó que la participación de los militares se realizará sólo en algunas circunstancias, para entregar la ayuda, como sucedió en Haiti. «Será la ONU la que decida dónde pueden tener una aportación significativamente diferente» los militares, aclaró, ante la alergia de la UE a hablar del envío de tropas de tierra por entrar en conflicto con la resolución 1793, que prohíbe una fuerza de ocupación. «No se tratará de tropas sobre el terreno como se entiende tradicionalmente», insistió Ashton.

La OTAN no estará al frente
La alta representante confirmó que los Veintisiete esperan «completar la planificación en los próximos días» de la misión militar y dejó claro que ya ha trasladado por carta al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, la disposición de la UE a enviar dicha misión. El pasado lunes, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, también ofreció la fuerza militar de la Alianza para proteger la misión humanitaria que puede autorizar en los próximos días Naciones Unidas, aunque descartó que la Alianza pretenda llevar el liderazgo, como está haciendo con la campaña militar.

Las palabras de Chacón están en consonancia con el requisito impuesto por la Unión Europea de que dicha intervención sólo se produzca con el visto bueno de Naciones Unidas. «Como miembros de la Unión Europea, estamos en disposición de sumar un cometido más a las Fuerzas Armadas españolas, que sería responder a la petición de Naciones Unidas de dar todo lo necesario a Libia en relación con la ayuda humanitaria que eventualmente podría necesitar», explicó la ministra a su llegada a un almuerzo en Madrid con el presidente de Colombia, José Manuel Santos. Europa Press matizaba por la tarde las declaraciones de Chacón y desmentía que España fuera a participar en un despliegue terrestre citando un portavoz de Defensa.

A tenor de lo dicho por Chacón, si bien España está «dispuesta a participar» en este cometido, matizó que se haría «con la configuración que tenemos actualmente». La presencia militar española se limita a cuatro aviones de combate F-18, un avión de reabastecimiento en vuelo, la fragata F-104 Méndez Núñez, el submarino S-74 Tramontana y un avión CN-235 de vigilancia marítima para el embargo de armas.

Además de la posibilidad de un despliegue de tropas sobre suelo libio, la comunidad internacional sigue trabajando para estrangular las finanzas del dictador. En la reunión de ayer que mantuvieron los ministros de Exteriores de la UE se aprobó una nueva ronda de sanciones contra dos individuos y 26 empresas adicionales, once de ellas del sector petrolero y gasista, al tiempo que acordó retirar las sanciones al ex ministro de Asuntos Exteriores libio Musa Kusa, que ayer viajó de Londres a Doha para reunirse con representantes de los rebeldes libios.

Según explicó la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, las medidas son «significativamente importantes» y se felicitó porque la presión financiera sobre el régimen está teniendo «impacto». Por otra parte, el Gobierno tiene previsto llevar este viernes al Consejo de Ministros la petición para prorrogar la misión española en Libia, que finaliza el próximo 22 de abril. Si finalmente se aprueba, el Congreso tendrá que dar su apoyo la próxima semana en la Comisión de Defensa.

La UA reclama «cooperación» a los rebeldes
El Comité Especial de la Unión Africana (UA) para Libia reclamó a los rebeldes mayor cooperación para buscar una salida dialogada al conflicto libio, después de que éstos rechazaran cualquier negociación que mantenga al coronel Muamar Gadafi en el poder. «Las condiciones políticas establecidas como requisito por los rebeldes hacen imposible un alto el fuego inmediato», informó ayer la UA después de reunirse con el Consejo Nacional de Transición libio (CNT) en Bengasi. «Por ello, llamamos al CNT a una cooperación total para encontrar una solución política, justa y duradera», agregó la Unión Africana.