Bronca de estreno

El motivo fue el pacto al que habían llegado el día anterior PP, IU y UPyD para evitar que el PSOE rompiera con el principio de solidaridad hacia los grupos minoritarios e intentara dejar a IU y UPyD sin representación en la Mesa de la Asamblea. El PP se comprometió a ceder un puesto, pero el PSOE ignoró la petición. Ante esto, el lunes, los tres grupos acordaron arrebatárselo mediante una combinación de apoyos en las votaciones.

Antes de que comenzara la sesión, la diputada del PSOE, Maru Menéndez, encendió la mecha. Acusó a los populares de no haberles avisado del pacto para el reparto solidario de la Mesa. En la votación, el PSOE mantuvo su negativa a ceder uno de sus dos puestos a IU o UPyD, sin embargo éstos lo consiguieron gracias al pacto con el PP. Cuando terminó la votación, fue Esperanza Aguirre la que se encargó de poner los puntos sobre las íes. La jefa del PP subió a la recién constituida Mesa y tras felicitar al nuevo presidente, mantuvo una breve discusión con el líder del PSOE, Tomás Gómez. Pero cuando éste abandonó el hemiciclo recurrió a Juan Barranco, número tres de los socialistas.

«Es un mentiroso y un maleducado. Le llamamos ayer cuatro veces», espetó indignada la presidenta en referencia a Gómez. Barranco se hizo el incrédulo y ella siguió: «Se lo dices tú, Juan, porque no coge el teléfono y encima miente y dice que no le hemos llamado». Al mismo tiempo, en los pasillos, Gómez continuaba con su estrategia y anunciaba que pondrá en manos de la Justicia el reparto solidario de la Mesa, mientras que Lucía Figar (PP) advertía de que «estudiarán» acciones legales contra el juez Torres por «esperar hasta el último minuto para levantar la imputación» al portavoz del PP.