Herrera ve necesario sacrificios para evitar la quiebra del Estado español

VALLADOLID – «Estamos instalados en una espiral diabólica. Más déficit nos lleva a más endeudamiento, éste a más obligaciones e intereses, ello a menores recursos y finalmente la quiebra». Éste era el análisis realizado por el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, para examinar las «duras» medidas de ajuste anunciadas por Mariano Rajoy en el Congreso pero que son más necesarias que nunca para salir de la más grave recesión económica en la etapa democrática española.

Herrera justificó estas decisiones amparándose en el gasto de las administraciones públicas el pasado año, con un coste de 90.000 millones superior a los ingresos y con más de 800.000 millones de deuda que arrastra el Estado español que lastra sus expectativas al demandar financiación en el exterior, al sufrir unos intereses más que elevados.

«Al menos los anuncios y análisis marcan una línea desgraciada de coherencia», señaló Herrera, que lanzó un tímido reproche a la herencia recibida por parte del Partido Socialista tras ocho años de Gobierno.

«Son medidas imprescindibles con duros sacrificios para todos los sectores», indicaba el presidente castellano y leonés, quien volvió a recalcar que el principal compromiso para este año será el «cumplimiento del 1,5% de déficit del PIB» y que para ello se realizará un seguimiento especial de los ingresos, para conocer si se ajustan a lo presupuestado y para acomodarlos a los gastos.

Herrera, quien estuvo acompañado en esta comparecencia por el portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago Juárez, y la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, manifestaba que se estudiará de qué manera afectará las medidas fiscales y de reforma de las administraciones anunciadas por el Gobierno y su aplicación en la Comunidad y, en este sentido, no confirmó si se va a quitar la paga extra de Navidad a los funcionarios públicos de la Región, que supondría un ahorro de unos 200 millones de euros, hasta que no se conozca si es una decisión «básica y vinculante». No obstante, aclaró que en el caso de que sí se tenga que quitar ese pago, «no tendría ninguna justificación» que no se vieran afectados del mismo modo los altos cargos del Gobierno.

Reacciones inmediatas
Tras conocerse las medidas que adoptará en los próximos días el Ejecutivo central, el aluvión de reacciones por parte de distintos sectores de Castilla y León no se hizo esperar.
Así, desde el Consejo Regional de la Cámara de Comercio, consideraban que la subida del IVA en tres puntos debe ir acompañada, de forma paralela, con un abaratamientos de las cotizaciones de la Seguridad Social. «Cualquier dilación en esta materia empeora la capacidad competitiva y encarece la contratación de trabajadores», manifestaron a través de un comunicado.

Más drásticos se muestran las organizaciones agrarias de la Comunidad, ya que desde UCCL consideran que la subida del tipo impositivo al 21 por ciento lleva aparejada el cierre de centenares explotaciones agrarias. Desde UPA y Coag se denuncia que la subida del IVA supondrá un sobrecoste anual de más de 61 millones para el sector agrario autonómico, en especial en energía, lubricantes o fertilizantes.

Óscar López califica esta «cuarta oleada de recortes» de «tsunami»
«Tras seis meses de Gobierno del Partido Popular, la situación empeora». Así de contundente se mostraba el secretario de organización nacional y portavoz del PSOE en las Cortes, Óscar López, que no dudaba en calificar esta cuarta oleada de recortes de un auténtico «tsunami» al «llevarse por delante los derechos sociales de miles de ciudadanos». López señalaba que las medidas anunciadas por Mariano Rajoy en el Congreso son «muy injustas socialmente» y que «ajustando sobre ajuste y recortando sobre recortes no se sale de esta situación ni se paga la deuda». Además, lamentó que todas ellas vengan impuestas desde la Unión Europea.