Yolanda Barcina: «En las manifestaciones piden menos ajustes y más tartazos»

MADRID- Si Yolanda Barcina ironizó catalogando de «un comienzo dulce» el que miembros del movimiento Mugitu le lanzaran dos tartas el pasado octubre, el final para los abertzales puede ser un tanto amargo. Tal y como adelantó LA RAZÓN el pasado martes, hasta 10 años de cárcel podría ser la condena de Gorka Ovejero, uno de los procesados y teniente de alcalde del Ayuntamiento de Arruazu, al aplicársele la agravante por beneficiarse de su condición de autoridad, y entre cuatro y seis a Julio Villanueva e Ibon García, al igual que Ovejero, miembros del comando Mugitu –colectivo en contra del trazado de alta velocidad de Navarra–. Ayer, el juez Pedraz añadió a Mikel Álvarez Forzada, hermano del ex dirigente de Batasuna Joseba Álvarez Forzada, en la imputación de un delito por atentado contra la autoridad al interrumpir el 29º Consejo Plenario de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos y agredir a la presidenta del Gobierno Navarro.

–Esta pena supondrá más reflexión antes de una nueva ocurrencia...
–Eso espero. Mi valoración es un respeto total a la Justicia, ahora hay que esperar a lo que resuelva el juez. La Policía Foral tiene todos los datos, nosotros hemos colaborado en lo que hemos podido.

–No así los partidos abertzales.
–Desde luego. En el primer momento en que no han condenado los «tartazos». Su argumentación es que fue una respuesta al «conflicto».

–¿Se ha vuelto a sentir agredida desde entonces?
–No físicamente. Pero las agresiones verbales son continuas, en forma de pancartas o mediante insultos. Los más habituales son «asesina o «facha».

–¿Cuál ha sido el altercado más reciente?
–Hace muy poco. Durante la manifestación en Pamplona, en contra de la reforma laboral, había carteles con mi cara donde pedían más «tartazos». La idea gustó, porque frente al Ayuntamiento de Pamplona también se manifestaron por los recortes. El eslogan fue: «Menos recortes y más tartazos».

–¿Cuál es la postura política de UPN para terminar con estas agresiones?
–Ir de la mano de la Ley. Reconozco que hay momentos muy difíciles, pero lo que tengo claro es que no voy a dejar de luchar por dar lo mejor a los ciudadanos de Navarra. Y no me voy a amedrentar. La vía democrática es la única manera de terminar con las prácticas totalitarias de los radicales.

–¿Cree que los pasos que está dando el Gobierno son los adecuados?
–Yo considero que, en general, se están consiguiendo muchos avances para que se abandone la violencia total. Se han tomado medidas eficaces en esta derrota. Lo fundamental es saber quiénes son las víctimas y quiénes no.

–Se respira cierta confusión; además de que Patxi López haya pedido el acercamiento de los presos, ahora el Gobierno vasco oficializa un decreto para indemnizar a familiares de los terroristas.
–Nosotros, como Gobierno de Navarra, tenemos muy claro quiénes son los asesinos y quiénes son las víctimas de esos crímenes. Que no son precisamente los que están en las cárceles. Esas políticas son un retroceso frente a los pasos que se están dando. Políticas que, en el parlamento de Navarra, los partidos abertzales respetan y aprueban. Y, teniendo en cuenta que Amaiur nos representa en el Congreso, dudo mucho que dejemos de escucharlas.