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Dani Pedrosa: «Fue muy duro cuando me rompí los dos tobillos»

Nació en sabadell (barcelona) en 1985. Con sólo cuatro años se subió por primera vez a una moto. En 2001, con apenas quince años, sorprendió al público con su determinación sobre la moto. Era el piloto más joven de la historia en disputar un mundial. En 2003 conquistó su primer título de 125cc. Se convirtió en el piloto español más joven en hacerlo. En 2004 ganó su primer campeonato de 250cc. Los dos años siguientes revalidó el título.

La Razón
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Más de uno empuja la moto de este joven piloto, cuando ha de adelantar a sus competidores, Rossi o Lorenzo. Pero a Dani Pedrosa le sobra la fuerza y el coraje para cabalgar sobre la moto y luchar por un hueco en lo más alto del podio. No ha habido caída ni rotura de huesos que haya frenado la meteórica ascensión del piloto a los «altares» del motociclismo mundial. Este domingo comienza una nueva competición y Pedrosa espera dar lo mejor de sí, pese a las «heridas de guerra» del año pasado, ya cicatrizadas.

-¿Cómo se encuentra de cara a la nueva temporada?
-Muy motivado y con ganas de llegar a Qatar. De momento los primeros entrenamientos en Malasia han ido muy bien. Tenía mucha curiosidad por ver cómo respondía el brazo izquierdo después de dos meses de inactividad y rehabilitación y los resultados han sido muy positivos. Todavía me falta tono muscular y fuerza, pero eso es algo normal, como me dijeron los médicos. Lo importante es que los calambres y la falta de fuerza han desaparecido.

-Desde que terminó el año pasado, ¿cómo ha cuidado sus lesiones?

-Descansando mucho. Por suerte no tuve que pasar por el quirófano, pero era necesario estar un tiempo parado, en reposo absoluto, y no siempre es fácil, porque hace que te entren las prisas cuando ves que se te echa el tiempo encima.

-De todas las que ha tenido, ¿cuál ha sido especialmente dura?

-Han sido dos. La primera en 2003, cuando me fracturé los dos tobillos en Australia sólo unos días después de proclamarme Campeón del Mundo de 125cc. Y de las más recientes, quizás la de la rodilla izquierda a finales de la temporada 2008, porque tardó mucho en cerrarse la herida, y en pretemporada me volví a lesionar en el mismo sitio. Tuve que pasar por quirófano y me perdí entrenamientos de pretemporada que repercutieron en el desarrollo de la moto y el inicio del Mundial 2009. Fue un momento duro.

-¿Qué rehabilitación ha tenido que seguir para encontrarse al cien por cien al inicio de ésta?

-Básicamente descansar y estar completamente inactivo. Tenía un problema con un nervio en la zona lesionada de la clavícula y los médicos me recomendaron reposo absoluto para dejar que el nervio se recuperara.

-En algunas ocasiones se ha mencionado su peso y que ello proporcionaba mayor velocidad a la moto, pero, ¿ello no implica mayor fuerza para manejarla?

-Efectivamente, con menor peso se necesita emplear más fuerza para mover la moto, porque utilizando el propio cuerpo no desplazas tanto peso, y requieres más fuerza para controlar las inercias. Por ello el año pasado aumenté mi masa muscular y un poco el peso trabajando más en esos aspectos en el gimnasio.

-En cuanto a la alimentación, ¿se cuida mucho?

-No sigo una dieta estricta, como de todo. Mi problema es que me cuesta mucho ganar peso, por lo que intento hacer cinco comidas al día.

-Destaca su capacidad mental cuando está en la pista a 300 km/h, ¿cómo se consigue esa fortaleza?

-Siempre me he concentrado mucho cada vez que subo en la moto, porque cualquier error lo pagas. Estamos hablando de un deporte donde cada décima de segundo cuenta y si pierdes la concentración es muy fácil cometer errores.

-Conducir una moto con múltiples lesiones resulta asombroso para el público que le sigue en cada competición, ¿qué es lo mejor y lo peor?

-No hay nada positivo en correr lesionado, te lo aseguro, nunca gusta tener que pilotar con dolor. Pero a veces, aunque no estés en las mejores condiciones, hay que hacerlo y entonces intentas concentrarte al máximo y dejar, en la medida de lo posible, el dolor a un lado.

-¿Qué le impulsa a seguir subiéndose a la moto a pesar de sufrir caídas?

-Competir, la competición en estado puro. Y disfrutar con lo que hago. Está claro que hay un gran esfuerzo, pero ¿quién no se esfuerza para conseguir lo que quiere? Me siento un privilegiado y nunca me cansaré de decirlo.

-¿Cómo animaría a alguien que le ha cogido miedo a subirse a la moto tras un accidente?

-Eso tiene que venir solo, no puedes subirte a la moto con miedo. Siempre se le tiene respeto, pero debes volver a subirte a la moto cuando sientes que estás preparado.

-A la hora de dormir, ¿qué le quita el sueño?

-Suelo dormir bien, pero si te refieres a cuáles pueden ser mis miedos, te diría que las lesiones y, por supuesto, la salud de los que me rodean, que estén bien.

-Cuando no está en los circuitos, ¿qué otros deportes le gusta practicar?
-Me gusta mucho salir a rodar en bicicleta, y en verano, también me encanta el mar y practicar windsurf.

-De las nuevas gimnasias: ¿ha probado alguna en especial pilates, yoga, tai-chi…?
-No en particular, hago un poco de todo con mi preparador físico. Trabajamos la fuerza y también la elasticidad, que es muy importante para pilotar en moto. Hay que estirar muy bien antes y después de subirte a la moto.