Libia y Japón entran en la cumbre

Bruselas- La cumbre del punto final se convirtió en la de los puntos suspensivos. Y con más drama que suspense. Tras la dimisión del primer ministro portugués, José Sócrates, Portugal quedó más cerca de seguir los pasos de Grecia e Irlanda en pedir el rescate financiero de sus vecinos del euro. La situación lusa monopolizó la discusión durante la tarde de ayer de los líderes europeos, quienes hace tan sólo quince días pronosticaron que cerrarían en este encuentro el «gran pacto» con el que dar la estocada a la crisis de la deuda soberana que castiga a la eurozona desde hace más de un año. Este acuerdo incluye una reforma legislativa para vigilar más de cerca el déficit y la deuda de los estados miembros y sus desequilibrios macroeconómicos, con sanciones para los incumplidores de los límites y recomendaciones; y los fondos de rescate (el temporal, hasta 2013, y el permanente, tras esta fecha) en caso de que fuera necesario reflotar a un socio.

El fondo de rescate
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, confirmó a última hora de la noche la creación de este fondo permanente –con 700.000 millones de euros de capital suscrito, de los cuales España deberá aportar el 11,9 por ciento del total, lo que según los cálculos es 83.328 millones de euros (9.523 millones como capital desembolsado y otros 73.804 millones como capital movilizable y garantías), en el plazo de cinco años, en vez de los tres estipulados hasta ahora– y una reforma limitada del Tratado para incluir este fondo. Los líderes de la UE también se comprometieron a aprobar, antes de junio, la reforma del fondo de rescate temporal, en vigor hasta 2013, de manera que pueda prestar hasta 440.000 millones de euros a un socio en apuros. Asimismo, quedó certificado el «pacto por el euro», demandado por Alemania, el último bloque en la nueva arquitectura económica de la moneda común. En la cena posterior a la primera jornada de la cumbre europea, los líderes aprovecharon para comentar el desastre que asoló el norte de Japón hace dos semanas y la situación de inestabilidad que se vive en Libia, y que amenaza con expandirse por el resto de Oriente Medio.

Las claves de la cumbre
- Gobierno económico
Las diferencias entre el Parlamento y los Estados complican el acuerdo.
- Pacto por el euro
Alemania logró el apoyo de los países para las reformas que incluye este pacto.
- Fondos de rescate
Las elecciones en Finlandia y la crisis portuguesa retrasan hasta junio su ampliación.
- Control bancario
La UE refuerza la supervisión financiera y hará más test de resistencia a la banca.