Estocolmo

Antonio Salvá: «La sociedad vasca tiene el síndrome de Estocolmo»

Antonio SalvÁ: «La sociedad vasca tiene el síndrome de Estocolmo»
Antonio SalvÁ: «La sociedad vasca tiene el síndrome de Estocolmo»larazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@73f8827e

MADRID–¿Cómo valora el ascenso de Bildu?
–Políticamente lo valoro por la razón de que han tenido el sindicato LAB y ellos han dominado la enseñanza. Lo veo así, por lo que han conseguido aglutinar mucha parte del voto joven. Además, no hay que olvidar que ETA aún vive, pero se les ha dado un premio por no asesinar. Me parece fatal que un tribunal político como es el Tribunal Constitucional sean los responsables, y lo veo así. Los de la izquierda abertzale están más fuertes que nunca, y tienen todo el dinero que les dé la gana. Tendremos que ver chulería a tope.
–¿Cree que se han intercambiado votos por pistolas?
–Pienso que sí. Se ha cambiado votos por pistolas, una auténtica rendición del Estado de Derecho, lo he dicho siempre. Basta imaginar qué pensaría un ciudadano americano si Al Qaeda se presentase a las elecciones norteamericanas y ganara. Es lo mismo, estamos hablando de lo mismo. De un grupo terrorista que se presenta a unas elecciones, con los 858 asesinados en su haber. Es un tema surrealista, kafkiano y esto sólo pasa en este país, en ninguno más. La llama de ETA no se ha apagado. Ellos en cuanto quieran empezarán con el proselitismo otra vez, y volverán a asesinar.
–¿Qué le está pasando a la sociedad vasca?
–La sociedad vasca tiene una especie de síndrome de Estocolmo, ahora se piensan que ellos son buena gente, que son otros, aunque el 30 por ciento están pringados de sangre, es decir; que es gente que ha pertenecido a la Batasuna y ésta es ETA. A mi modo de ver es un premio que se les ha dado, una rendición.
– ¿Qué cree que va a pasar ahora?
–Que el Parlamento va a contar con varios miembros de la antigua Batasuna y tendrán un sueldo que yo les voy a pagar. Es kafkiano, esto sólo pasa aquí, en ningún otro sitio.
–¿Cree que con este avance de Bildu se pone fin definitivamente a la banda terrorista ETA?
–Ellos, aunque están muy debilitados, no están muertos. Tienen armas, tienen arsenales, tienen gente... pueden asesinar en cualquier instante, pero mientras sus objetivos se vayan cumpliendo poco a poco no van a asesinar. No obstante, cuando vean que no se cumple con sus objetivos, se empezará a asesinar... ¡Ojalá me equivoque!
–¿Hemos retrocedido en el tiempo?
–Políticamente están ahora fortísimos. Se van a encontrar con un problema político enorme. Si el PNV pacta con Bildu, estos se los comen, por lo que creo que no lo harán. No sé lo que pasará, pero Bildu estará ahí, tendrá voz y voto y una plataforma para hablar como es el Parlamento vasco, una plataforma buenísima.
–A su hijo le asesinó ETA. ¿Qué siente cuando ve que los simpatizantes de la banda han salido reforzados? ¿Le preocupa que los 858 asesinatos no hayan servido de nada?
–Sientes que los políticos que tenían que velar por nosotros no lo hacen. Tenían que haber sacado una nueva línea para que los batasunos siguiesen en el limbo político porque no han pedido perdón ni se arrepienten... Les premiamos por asesinar.