Los anuncios de contactos conducen hasta las mafias

Las mafias de trata de personas con fines de explotación sexual utilizan los anuncios clasificados de los medios de comunicación para hacer publicidad de sus víctimas, que son obligadas a prostituirse y amenazadas, incluso con la muerte, si no acceden a sus peticiones. Esto lo saben muy bien las Fuerzas de Seguridad del Estado y utilizan los anuncios de contactos para encontrar pistas sobre estas redes mafiosas.Carlos Igual, capitán del grupo contra la explotación sexual de la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil, tiene claro que «los anuncios de contactos son un medio de captación de clientes, sobre todo para mujeres que trabajan en pisos y hoteles». Por ello, utilizan este tipo de publicidad para buscar «pistas que nos permitan llegar hasta las organizaciones mafiosas».Indicios y limitacionesIgual lamentó que los anuncios de sexo «son sólo indicios» porque no pueden ofrecerse como clientes para comprobar quién está detrás de ellos. «Estaríamos participando en una actividad delictiva», dijo. Por ello, indicó, sólo podemos «utilizar los teléfonos que se publican en los periódicos para cruzarlos con datos de las investigaciones abiertas, que nos permitan llegar hasta los lugares donde se explota a las mujeres».Entonces, si se sabe que las bandas organizadas se lucran con estos anuncios ¿por qué no se prohíben? En opinión del capitán del grupo contra la explotación sexual de la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil «es una cuestión que debe abordarse mediante un debate amplio». En este sentido, explicó, «la prostitución no está prohibida. Hay anuncios en los que están implicadas las bandas de trata y otros en los que hay mujeres que ofrecen servicios sexuales de forma voluntaria. La ley prohíbe el proxenetismo y por eso hay que ser cautos».Igualmente cree que el papel de los medios de comunicación «es complicado» porque «ellos venden un espacio a una actividad que supuestamente es legal. Establecer filtros de control no evitaría el problema porque es muy común el uso de móviles desechables». Por ello, añadió, «si queremos paralizar la demanda de la prostitución hay que ir a todos los medios donde se puede publicitar, incluido internet».

Mucho camino por recorrerPara el comisario, el plan de trata puesto en marcha por el Gobierno en enero del año pasado es un avance, pero queda mucho camino por recorrer. «El principal problema con el que nos encontramos cuando intervenimos en los clubes y bares de alterne es encontrar a una víctima dispuesta a colaborar. Cuando realizamos una operación antidroga, tenemos el material incautado como prueba, pero en el tema de la trata no lo hay y dependemos de la denuncia de las víctimas, algo que es muy complicado de obtener».Esta realidad es consecuencia de «la extorsión y amenazas a las que están sometidas». Para Igual, uno de los ejemplos más claros, por su dureza, es el de las mafias de origen soviético: «Las mujeres explotadas saben que como cinfiesen van a matar a su familia, por eso se niegan a colaborar. Hay que mejorar la atención y protección para ofrecer más salidas y garantías para ellas y sus familias». En cuanto al aumento de detenciones, Igual declaró que «es difícil saber si se debe a la entrada en vigor del Plan de Trata o a que hay mayor presencia de bandas criminales en España. En los últimos años se han disparado las detenciones de pedófilos, pero ¿eso quiere decir que hay más?». «Lo que está claro es que cada vez tenemos más medios y más recursos y en cuanto se apruebe la reforma del Código Penal tendremos más herramientas para poder actuar», aclaró.Sin embargo, esta medida no es la panacea y se necesita dar continuidad al trabajo iniciado hace año y medio porque la lucha contra la explotación sexual entraña muchos peligros: «Si mejora la persecución de este tipo de delincuentes, reaccionarán y se harán más cuidadosos. Tenemos el ejemplo de Suecia donde, tras la prohibición de la prostitución, se produjo un aumento de la presión sobre las víctimas, que fueron más amenazadas y más controladas. Ninguna solución es perfecta».

"Las condenas siempre nos parecen cortas"El colectivo más vulnerable es el de los menores de edad. Carlos Igual aclaró que «no se encuentran directamente en los anuncios porque serían inmediatamente retirados. En cambio, recibimos muchas denuncias cuidadanas sobre anuncios o páginas en las que se ofrecen servicios sexuales de menores. Si detrás de esta publicidad hay mafias de trata, también puede haber menores porque trabajan con mujeres de todas las edades». Uno de los problemas detectados por las asociaciones es que en las intervenciones policiales no se diferenciaba a las víctimas y por lo tanto, no se están indentificando a las menores de edad afectadas. El comisario de la Policía Judicial confía en que la reforma del Código Penal, que incorpora el delito de trata y aumenta las penas de prisión, «nos ayude a perseguir mejor el proxenetismo, aunque las condenas siempre nos van a parecer cortas. Eso significa que les vamos a ver pronto en la calle haciendo lo mismo»