Champions League

Luxemburgo

Y a la séptima fue el empate (1-1)

El Madrid marca por fin en Gerland . Un minuto después de salir Benzema hizo el 0-1; el 1-1, Gomis

Benzema encarrila el pase a cuartos (1-1)
Benzema encarrila el pase a cuartos (1-1)larazon

A la séptima tampoco fue la vencida, pero sí el empate, el primero del Madrid en Gerland después de tres derrotas: 3-0, 2-0, 1-0... Y 1-1. Por cadencia, tocaba. Y pudo vencer. El árbitro no vio un penalti de Gourcuff, mano clarísima, tras sendos remates a la madera de Ronaldo y Ramos. Marcó Benzema, nada más entrar, y respondió Gomis en el minuto 83 con el 1-1. No terminaba del todo la maldición, pero se atajaba el gafe.

Después de seis confrontaciones, saldadas con tres victorias del Lyon y tres empates, el Real Madrid, aplicada víctima de octavos, acarició su primer triunfo. Lo rozó con el gol de Karim, precisamente de él, ex lionés, carne de banquillo cuando jugaba Higuaín y también con la incorporación de Adebayor. Lástima del tanto de Gomis. Quedan 90 minutos en el Bernabéu y resulta harto improbable, aunque el fútbol sea fútbol, que el equipo de Mourinho vaya a dejar escapar la oportunidad de clasificarse.

Dicen que Mourinho no pudo contenerse en una jugada protagonizada hace unos partidos por Sergio Ramos: «¿Y éste es campeón del Mundo? ¡Tácticamente es un desastre!». Lo escuchó todo el banquillo madridista. Ha trascendido cuando el santo del sevillano se ha dado la vuelta, acaso girado por el entrenador. Pero fue titular. No se le ve con el desparpajo habitual, suelto; parece inseguro. Sin la confianza del técnico... A los diez minutos vio la primera tarjeta del partido y deshizo el fuera de juego en el gol de Gomis. Pero se entregó. En la banda contraria, Arbeloa, la sobriedad, el obligado cumplimiento. En el banquillo, Marcelo. «Mou» quería atar corto a Bastos, que iba de un extremo a otro, y a Delgado; cambió profundidad por seguridad. Conclusión: ni Casillas ni Lloris tocaron la pelota en 30 minutos.

Puel planteó un partido de contacto, sin contemplaciones. Consciente de la superioridad técnica e individual del otro, optó por no darle respiro y desató una plaga que ocupó el campo entero. Cris y Lovren, centrales, subían hasta la media para hacer faltas; mejor lejos de la portería. Toulalan repartía delante de ellos, sin perder de vista al rocoso Kallstrom, al imaginativo Gourcuff y a Bastos y Delgado, sendas pesadillas. Y Reveillere y Cissokho impermeabilizaron sus bandas. El más flojo, Gomis, que al final lo arregló. Dispuso de la ocasión más clara cuando Casillas, en plancha, despejó demasiado corto; su disparo, desde el lugar ideal, tropezó en el milagroso codo de Iker.

El Madrid no cogió el pulso al partido; no supo apoderarse del balón y cuando lo tuvo le duró un suspiro. Le superaba el enjambre francés. Adebayor no vio la pelota arriba y tuvo que bajar para rascarla. A Cristiano, como a Özil y Di María, le dejaron sin espacios; salían del primer regate; a trompicones, del segundo, y en el tercero, caían al suelo. El Olympique mordía y el Real veía las tarjetas.

Cuando cayó el telón del primer tiempo, el Madrid había tirado dos veces a portería, como el Olympique. Así que, tras la reanudación, Cristiano estrelló una falta en el poste y a continuación Sergio Ramos cabeceó al larguero. Dos jugadas a balón parado, casi dos goles. Con 50 minutos en las piernas, los madridistas se mostraban demasiado estáticos y los contrarios no abandonaban el carril: ni una facilidad en defensa y presión total para evitar el juego combinativo, aunque a ellos les pesaban más las botas. Hicieron un fabuloso ejercicio de maratón y lo acusaron. Mourinho, entonces, introdujo el primer cambio: Benzema por Adebayor. Providencial. Entró Karim y el público del Gerland le recibió con una cerrada ovación. Él correspondió con un gol. Llevaba un minuto cuando tocó el primer balón, luchó por él en la banda, se lo quedó Özil, él se desmarcó y Cristiano se lo entregó. Se zafó de dos defensas, chutó y metió la pelota por entre las piernas de Lloris. Él no lo celebró; Florentino Pérez, en el palco, sí. El presidente alzó los brazos y Benzema se dejó abrazar. La maldición empezaba a ser desterrada. El equipo que sentenció a Luxemburgo, Capello y Pellegrini caía en su campo, hasta que Gomis aprovechó un desajuste en la defensa y en una de esas jugadas desesperadas marcó. Sergio Ramos deshacía el fuera de juego. ¿Es un desastre? No, es mala suerte; pero pinta mejor.


«Fue un arbitraje inaceptable, todo el mundo vio el penalti»
Mourinho se quejó amargamente de la jugada polémica del partido, el penalti por mano de Gourcuff que el árbitro no pitó: «Es inaceptable. Yo lo he visto y estaba a cincuenta metros, todo el mundo lo ha visto menos cuatro ojos, los del árbitro, que estaba a cinco metros, y los del árbitro auxiliar, que estaba a otros cinco. Esperemos que no sea una jugada decisiva». Valdano y los jugadores también mostraron su descontento por la decisión de Stark.


Valdano: «El resultado nos deja en una posición muy favorable»
Ni Florentino Pérez pudo contenerse en el gol de Benzema. El presidente lo celebró en el palco con los brazos en alto, pero con moderación. Benzema no lo festejó por respeto al que fuera su público y a la que es su ciudad. Sólo llevaba un minuto en el campo, y fue aplaudido al entrar. «Karim ha mejorado muchísimo tanto en el plano ofensivo como en el defensivo, pero también en carácter, por lo que está en condiciones de ser titular en el Real Madrid», defendió José Mourinho. La igualada de Gomis fue un pequeño mazazo, pero las conclusiones son positivas. «El resultado nos deja en una posición muy favorable», aseguró Jorge Valdano en TVE. «Mi equipo no tiene miedo a la historia y hemos empezado a cambiarla al empatar por primera vez en Gerland, por lo que en Madrid esperamos ganar», completó Mourinho. Valdano también confía en el Bernabéu para romper la racha de seis años seguidos cayendo en octavos. «El equipo inspira confianza, sobre todo en casa», dijo. El Real Madrid ha ganado todos los partidos de la temporada en el Bernabéu y eso es una garantía. Lo peor fue el pinchazo que sufrió Khedira en el cuádriceps de la pierna izquierda. Hoy se someterá a pruebas para conocer el alcance de la lesión.


Ficha técnica:


1 - Olympique Lyonnais:
Lloris; Réveillére, Cris, Lovren, Cissokho; Toulalan, Kalstrom (Pjanic, min. 76); Gourcouff; Delgado (Pied, min. 69), Bastos (Briand, min. 69), Gomis.

1 - Real Madrid:
Casillas; Ramos, Pepe, Carvalho, Arbeloa; Alonso, Khedira (Lass Diarra, min. 68); Di Maria, Ozil (Marcelo, min. 75), C. Ronaldo; Adebayor (Benzema, min. 64).

Goles:
0-1, min. 65: Benzema;1-1, min. 83: Gomis;

Arbitro:
Wolfgang Stark (GER). Mostró tarjetas amarillas a Sergio Ramos (min. 9), Di María (min. 44), Bastos (min. 48), Cris (min. 62), Pjanic (min. 90).

Incidencias: Asistieron 40.200 personas, lleno absoluto, al partido correspondiente al parido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el estadio de Gerland