París

«Mikel Antza» pide en un tribunal de París el inicio de una nueva negociación

La Razón
La RazónLa Razón

Ni una palabra sobre la posible disolución o entrega de las armas. Al contrario, una oferta de negociación (lo que supone continuidad de actuaciones de la banda) a los gobiernos de España y Francia para la «resolución del conflicto».

El que fuera jefe del «aparato político», Mikel Albizu Iriarte, «Mikel Antza», y la responsable de «finanzas», Soledad Iparraguirre Guenechea, «Anboto», dejaron claro ayer en París, ante el tribunal que les juzga, que la estrategia de ETA pasa ahora por intentar un nuevo proceso de negociación, para lo que «tiene la mano tendida una vez más», según un texto leido por los terroristas.

«Anboto» hizo un llamamiento a París y Madrid para que actúen «con responsabilidad y sentido histórico», informa Efe.

Aunque ambos han reivindicado repetidamente su pertenencia a la banda criminal, aseguraron que «no somos terroristas, no tratamos de destruir el Estado español ni tampoco el francés», sino construir un Estado vasco «para sobrevivir como pueblo». «No queremos imponer nuestra opción política a nadie», sino que los vascos puedan decidir su futuro «sin límites y sin injerencias», aseguraron.

«Antza» negó legitimidad al tribunal para juzgarlo porque «sólo» rinden cuentas «ante el pueblo vasco».

Asimismo, se quejó de que España y Francia dividen el País Vasco por lo que «hace demasiado tiempo» que su identidad está «amenazada de desaparición».

Durante la vista se produjo un incidente cuando Soledad Iparraguirre pidió un minuto de silencio en recuerdo por otra etarra muerta y el juez no lo admitió.

Ante esa negativa, los acusados entonaron el «Eusko Gudariak» (himno del «soldado vasco») mientras eran desalojados, al igual que las varias decenas de personas que asistían a la audiencia como público, con el puño en alto.