Brasil encuentra restos en el océano que podrían ser del avión desaparecido

Aviones de la Fuerza Aérea del Ejército brasileño ha encontrado restos de metal y asientos, que podrían pertenecer a los restos del fuselaje del avión desaparecido en la jornada de ayer mientras realizaba el trayecto Río de Janeiro-París, y en el que viajaban 228 personas, entre ellos dos españoles. Además, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) indicó que dos aviones de la compañía germana Lufthansa podrían tener la clave de lo ocurrido ya que sobrevolaron la zona donde presuntamente desapareció el A330-200 de Air France media hora antes de que desapareciera.
Aunque todavía no se ha confirmado que pertenezcan al avión de Air France desaparecido, la Fuerza Aérea brasileña ha avistado restos de metal y de lo que podrían ser asientos de un avión a más de 650 kilómetros del archipiélago brasileño de Fernando de Noronha, en el noreste de Brasil. Según informó el portavoz de la Fuerza Aérea, Jorge Amaral, en un comunicado televisado, los restos han sido hallados pasada la una de la madrugada (seis de la madrugada en España). Los aviones también han podido avistar manchas de combustible en esta zona del océano situada a unos 650 kilómetros de Fernando de Noronha y a 160 de las islas de Sao Pedro y Sao Paulo.
Por otra parte, la Organización Meteorológica Mundial aseguró que tiene información preliminar que indica que dos aviones de la compañía alemana Lufthansa registraron datos sobre las temperaturas y los vientos de la zona media hora antes de que desapareciera el avión de Air France, aunque advirtió de que las aeronaves no estaban equipadas para transmitir automáticamente información sobre tramos con turbulencia. "Dos aviones de Lufthansa pasaron por algún lugar cercano al vuelo de Air France, pero como no sabemos la ubicación exacta del accidente, es extremadamente difícil decir cuán cerca estuvieron", dijo el jefe de la división de meteorología aeronáutica de la OMM, Herbert Puempel.
Cabe recordar que, según el director general de Air France, Pierre-Henri Gourgeon, el Airbus desapareció con 228 personas a bordo --incluidos siete niños y un bebé-- cuando se dirigía desde Rio de Janeiro a París y que había emitido un mensaje hacia las 04:14 horas en el que alertaba de un cortocircuito "en una zona alejada de la costa". Por su parte, el director de comunicación de Air France, Franóis Brousse, indicó que lo "más probable"es que el aparato "fuese fulminado por un rayo".

Una mujer de nacionalidad hispanoargentina identificada como Clara M.A. y nacida en Málaga se incluye en la relación de personas desaparecidas del vuelo AF447 en aguas del Atlántico, por lo que se eleva a tres el número de españoles que viajarían en este avión desaparecido cuando cubría el trayecto Río de Janeiro (Brasil) París tras los casos del ingeniero de Marchena (Sevilla) Andrés S.M. y la consultora catalana Anna Negra.
Fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Argentina informaron de que esta mujer de 32 años trabajaba como azafata para Air France.
Ya se conoce la identidad de la mujer que viajaban en el avión. Se trata de Ana Negra Barrabeig, catalana de 28 años y residente en Dubai, según confirmó un portavoz de la Embajada española de Emiratos Arabes Unidos. Ana Negra, trabajaba en una consultoría, vivía junto a su marido J.A.Q en Dubai, estaban recién casados, no tenían hijos y eran "muy queridos por la colonia" española establecida en la ciudad. Al parecer, el marido, también español, llegó un día antes a Francia.
Además, el otro español desaparecido es Andrés Suárez Montes, un ingeniero de 38 años natural de Marchena (Sevilla), casado pero sin hijos, según ha informado Iván Casero Montés, primo del desaparecido. Andrés Suárez Montes había contraído matrimonio hace aproximadamente un año y trabajaba para la multinacional 'Schlumberger', dedicada a la innovación tecnológica en el negocio de exploración y producción de petróleo y gas.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha trasladado hoy "todo el cariño y afecto"de España a los familiares del avión de Air France. Asimismo, Zapatero ofreció al Gobierno francés la colaboración del Ejecutivo que preside para cualquier cosa que puedan precisar en relación con la catástrofe.
"España está colaborando con un avión de la Guardia Civil para intentar, en una zona tan amplia, encontrar los restos del avión siniestrado y desde luego en todo aquello que pueda colaborar el Gobierno de España con el Gobierno de Francia lo hará sin duda y con entrega", afirmó. Horas más tarde, el Ministerio de Defensa confirmaría el envío de un segundo avión especializado en búsqueda y rescate (SAR) 'Fokker' F27 Maritime del Ejército del Aire, con sede en la Base Aérea de Gando, en Gran Canaria, para participar en la localización del avión Airbus A-330.
El presidente del Gobierno señaló además que el Ejecutivo ha trasladado su pesar a las autoridades brasileñas y francesas, ya que la mayor parte del pasaje del avión tenía alguna de estas dos nacionalidades.

En lo referente a las causas del posible accidente, el presidente de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas de Argentina (APLA), Jorge Pérez Tamayo, advirtió que el Airbus 330 está preparado para soportar "los rayos", algo que "ocurre a menudo", y que lo extraño en el accidente del vuelo de Air France es que los pilotos no hubieran tenido "tiempo de alertar bien sobre cuál era la falla que tenían".
"Todo lo que se diga sobre la desaparición del avión de Air France son conjeturas, ya que hasta que no se realice un estudio con la nave no se sabrá la causa correcta de esta tragedia. Lo sorprendente es que los pilotos no hayan tenido tiempo de intentar solucionar el problema", declaró Pérez Tamayo al diario 'La Nación'.
Asimismo, aseguró que "el Airbus 330 que desapareció tiene un sistema de emergencia que hace que, cuando golpea contra la tierra o se interna en el mar, salgan a flote unas balizas que transmiten durante las 24 horas una señal de alarma".

Un viaje de novios que cabó en tragediaAna Negra, trabajaba en una consultoría, vivía junto a su marido J.A.Q en Dubai, estaban recién casados, no tenían hijos y eran "muy queridos por la colonia"española establecida en la ciudad. Al parecer, el marido, también español, llegó un día antes a Francia. La joven catalana Annase había casado hace menos de un mes en las cavas Raventós i Blanc, en Sant Sadurní d'Anoia, y es miembro de la conocida familia vitivinícola catalana.La mujer, de 28 años, se había casado a principios de mayo con Javier Álvarez Quero y ambos habían ido a Brasil en viaje de novios.Anna Negra había decidido regresar sola y visitar a su familia en Barcelona antes de volver a su domicilio en Dubai (Emiratos Árabes), mientras que su marido había viajado en un vuelo anterior y ya se encuentra en Dubai.Anna Negra es prima hermana del actual presidente de las cavas Raventós i Blanc, Manel Raventós Negra, presidente de esta empresa, una de las más importantes de Sant Sadurní d'Anoia y creada el año 1986.

Sin esperanzas 

El presidente francés no mantuvo ninguna ambigüedad tras reunirse con los familiares de los pasajeros, alejados de la prensa, víctimas de crisis de ansiedad y angustia, y a los que fue necesario prestar atención psicológica. «Las posibilidades de hallar supervivientes son muy escasas» dijo Nicolas Sarkozy, tras ese encuentro, y confirmó que España está aportando una importante ayuda a los medios aéreos y marítimos desplegados por Francia para intentar localizar los restos del aparato y el lugar en el que pudo estrellarse en una zona desconocida del Atlántico que representa cinco veces la superficie del país galo.
El Gobierno francés ha pedido incluso la colaboración del Pentágono norteamericano y sus sofisticados sistemas de radares y satélites para tratar de circunscribir la zona del más que probable accidente y aportar luz a un drama del que Sarkozy confirmó «no se tiene ningún elemento preciso». Es decir, que las certezas sobre lo que pudo ocurrir son extremadamente exiguas.
La falta de datos es la peor perspectiva a la que se enfrentan las autoridades y expertos que no descartan que las cajas negras del aparato, que podrían contener muchas respuestas, se las haya tragado el mar y no aparezcan nunca.
Las hipótesis sobre las causas del probable accidente son tantas como los interrogantes e incógnitas que ayer empezaron a plantearse. Desechada la eventualidad de un atentado terrorista, afloraron preguntas sin respuesta como la ausencia de todo mensaje de auxilio por parte del piloto a partir del momento en que se detectaron los primeros fallos.

ANÁLISIS: La baliza de posición falló, lo que complica la localización¿Cómo actúa un piloto en caso de encontrarse con una tormenta? –La primera opción, siempre que se pueda, es atraversarlo por una zona en la que no haya peligro. En esta ocasión, el avión se topó con el frente tropical, origen de todos los huracanes. Esquivarlo hubiera sido una opción, pero la extensión de la tormenta, que puede superar los 200 kilómetros, la hacía inviable. Al parecer, el piloto intentó atraversarlo por una zona «viable».¿Cómo es posible que no se sepa el paradero de un avión en vuelo durante horas?– Durante estos trayectos, los pilotos deben comunicar su posición a través de la radio porque no existe ningún radar en el Atlántico. El aparato de Air France comunicó su paso por Recife y no llegó a comunicarse con el siguiente punto, en la isla de Sal de Cabo Verde.¿Qué pasa en caso de emergencia? – El comandante puede dar una señal de aviso por radio o, incluso hacer una llamada vía satélite. Si nada de esto ocurre y el avión se estrella, una baliza informa de su localización a través de un satélite. Esta baliza está diseñada para soportar una colisión contra una montaña, pero no funcionó. en caso de fallo, esta señal se puede activar de forma manual.¿Cuándo se da un avión por desaparecido? –Las autoridades deben esperar a que pase el tiempo necesario para que el combustible que lleva avión se haya agotado. Todos las aeronaves llevan lo necesario para el trayecto, más una cantidad extra para llegar a un aeropuerto alternativo y otra para tener media hora más de autonomía de vuelo por los imprevistos.