Cristina Kirchner «Gran cuñada»

El ministro argentino de Justicia, Aníbal Fernández, pidió el viernes que se deje de imitar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en «Gran Cuñado», una parodia de la política nacional que forma parte de un popular programa cómico de la televisión del país.El ministro comentó que «algunas cosas» de esta parodia le parecen «excesos», si bien matizó que «hay momentos bien logrados».«Gran Cuñado», una parodia en versión política del «reality show» «Gran hermano», comenzó esta semana con el ingreso «a la casa» de imitadores que encarnan a la mandataria argentina, a su esposo y antecesor, Néstor Kirchner, y a dirigentes oficialistas y opositores.El segmento, que forma parte del programa «Showmatch» del canal 13 argentino, ha logrado una audiencia de millones de espectadores que se ríen de los dichos, discusiones y situaciones que encarnan los imitadores de 19 personalidades de la vida política, varios de ellos candidatos en los comicios legislativos del 28 de junio próximo.Proteger la investiduraAníbal Fernández, quien es uno de los imitados en esta parodia, se declaró «arrepentido» de haber dicho hace unos días la «frase poco feliz» de pedir «una regulación» en los medios de comunicación para proteger la investidura presidencial.La prensa local se ha hecho eco de veladas protestas de algunos de los políticos imitados mientras que otros se han declarado satisfechos por cómo los han copiado los actores de «Gran Cuñado».El productor del espacio, Marcelo Tinelli, por su parte, no ha querido opinar ni tampoco su productora, Ideas del Sur, ha difundido ningún comunicado sobre el asunto. Fuentes de la empresa se limitaron a decir que «Gran Cuñado» es «un juego humorístico» y que se van a mantener los criterios establecidos. Es decir que el voto de la gente decidirá qué personajes saldrán del sketch.