Damasco

Desmantelan una célula que trabajaba para el Mosad israelí en Líbano

Una célula que supuestamente trabajaba desde los años ochenta del pasado siglo para el servicio secreto de Israel en el extranjero (Mosad) ha sido desmantelada por las autoridades libanesas, asegura hoy el periódico libanés "As-Safir".
El cabecilla de la célula fue detenido en el valle oriental de la Bekaa, según el rotativo, que no precisa la fecha, y que cita fuentes judiciales y de seguridad.
Su arresto se produjo después de que las autoridades observaran sus movimientos en el Líbano y sus desplazamientos a la vecina Siria, añadieron las fuentes.
"As-Safir", cercano a Siria, se hace eco de relatos de los testigos quienes aseguran que las Fuerzas Armadas libanesas descubrieron documentos comprometedores en la casa del detenido y hallaron en su vehículo todoterreno una cámara capaz de tomar fotos muy nítidas.
El hombre no tenía trabajo fijo y algunas veces aparcaba su coche en la ruta internacional entre la ciudad de Chtaura y el puesto fronterizo de Masnaa, añadieron las fuentes.
Fuentes cercanas a la investigación, según "As Safir", revelaron que el hombre había reclutado a varias personas y que su vehículo tenía equipos de alta tecnología que le permitían estar en contacto con Israel.
También dijeron que el ejército libanés arrestó a un pariente del supuesto cabecilla de la célula libanesa que trabajaba para el "Mosad"y quien confesó que éste observaba los movimientos de personalidades y convoyes, sobre todo en la Bekaa, pero que en los últimos años esta actividad se había concentrado sobre Hizbulá.
Las investigaciones revelaron que entre las áreas que vigilaban en Damasco está la de Kfar Susa, donde en febrero pasado fue asesinado el jefe militar de Hizbulá, Imad Mugnieh, y ahora tratan de determinar si estaba implicada en la guerra de 2006.
No es la primera vez que se informa del desmantelamiento de redes que trabajan para Israel.
En el año 2006 fue detenido el ex policía Mahmud Rafah, que fue acusado de haber matado a responsables responsable de la Yihad Islámica y del grupo chií Hizbulá.
En el 2004 una tunecina y cuatro de sus cómplices fueron detenidos y acusados de intentar asesinar al jefe del Hizbulá, jeque Hasan Nasralá.