Francia

Detenida una célula de ETA con explosivos para un gran atentado

Los tres arrestados en Guipúzcoa esperaban la entrada de un «comando» operativo desde Francia

Detenida una célula de ETA con explosivos para un gran atentado
Detenida una célula de ETA con explosivos para un gran atentadolarazon

La célula de «legales» (no fichados) desarticulada ayer por la Policía Nacional en la localidad guipuzcoana de Usurbil tenía como misión abastecer de explosivo y otros productos a un «comando» de ETA que iba a entrar desde Francia, según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas. Con el material que se ha incautado podría haberse perpetrado un gran atentado. Razones de seguridad y oportunidad han aconsejado realizar ahora la operación. Aunque los arrestados estaban siendo vigilados desde hace tiempo, siempre cabe la posibilidad de que el material que escondían pudiera terminar en manos del «comando» encargado de cometer los atentados. Por ello, durante la madrugada del martes, agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional irrumpieron en una nave del polígono industrial de Ualdea de Usurbil, que había sido habilitada como vivienda, y detuvieron a Patxi Uranga y Olatz Lagasabaster.Material escondidoEn el local estaba escondido el material: 65 kilos de nitrato amónico (divididos en 38 paquetes de 1,7 kilos cada uno); 30 bolsas de polvo de aluminio, con un peso total de 10 kilos; 25 metros de cordón detonante artesanal; y otros elementos para la confección de artefactos explosivos.Los expertos creen que los walky-talkies hallados en la nave iban a ser utilizados como alternativa a los teléfonos móviles (los etarras están obsesionados con las intervenciones policiales). Los grilletes que escondían los presuntos terroristas servirían para inmovilizar a una persona a la que hubieran robado el automóvil. Entre el material también había linternas, una especie de monitor y un cartel de tela con el anagrama de ETA. Las expertos van a analizar ahora el ordenador que se ha incautado a los detenidos por si contuviera algún archivo con objetivos de atentados u otros datos de interés. En los once meses que han sido investigados no se les han observado movimientos que hicieran sospechar que preparaban atentados, aunque cabe la posibilidad de que, como ha ocurrido en otras ocasiones, los hubieran sacado de internet.El material, transportado desde Francia por «correos» de la banda, había sido recogido por los arrestados en un punto convenido dentro de territorio español. Después, lo habían trasladado a la nave de Usúrbil a la espera de que llegara la célula operativa que iba a utilizarlo.Uranga y Lagasabaster formaban parte del entramado creado por los «liberados» del «comando Askatun Haizea», Arkaitz Goicoechea y Jurdan Martitegi. Al ser desarticulada la célula por la Guardia Civil, en julio de 2007, y detenido Goicoechea, quedaron «descolgados», pero hace meses habían recuperado el contacto con la banda, probablemente a través de Martitegi, que se hizo cargo de los «comandos» en enero de este año. Estuvo poco tiempo en este «puesto», ya que fue capturado en Francia el pasado abril.La tercera detenida, Ainara Vázquez, arrestada en la localidad guipuzcoana de Astigarraga, visitaba con regularidad la citada nave. Los investigadores sospechan que pudiera realizar misiones de enlace con ETA, ya que su nombre apareció en una lista que fue encontrada en poder de Ibon Fernández, «Súsper», que llegó a ocupar el puesto de coordinador general de la banda.La Policía va a investigar la utilización de dos automóviles, un Opel y un SEAT, que han sido intervenidos a los detenidos.La operación fue dirigida in situ por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que ha ordenado que a los arrestados se les aplique un protocolo que incluye la grabación permanente en vídeo de los mismos y la posibilidad de que sean visitados por un médico de su confianza. Expertos antiterroristas consideran que estas medidas restan operatividad a las investigaciones.Los Etarras Patxi Uranga, Olatz Lasagabaster y Ainara Vázquez

Los «legales», cada vez más importantesETA, tal y como adelantó LA RAZÓN en su edición del lunes, concede gran importancia a los «legales» dentro de la planificación general de su actividad criminal y les encomienda, entre otras misiones, que oculten las armas y explosivos que después utilizarán «comandos» operativos de la banda. Es el caso de los arrestados ayer en la operación de la Policía Nacional que, según sospechan los expertos, iban a colaborar activamente con una de estas células que tenía previsto llegar desde Francia. La sucesiva detención de los tres últimos jefes de «comandos» (Garikoitz Aspiazu, «Txeroki», en noviembre de 2008; Aitzol Iriondo, «Gurbitz», un mes después; y Jurdan Martitegi, en abril de este año) ha debido de retrasar la activación de este grupo y se han evitado, por tanto, los atentados que iba a cometer. En la imagen, los detenidos ayer.