Crisis en el PSOE

Más allá de la unidad

La Razón
La RazónLa Razón

La imagen de unidad contra el último atentado de ETA ha sido impecable. Los discursos de Patxi López, Zapatero y Rajoy, también. Pero más allá de ese nexo común frente a la violencia, produce aún fuerte desazón contemplar la reacción de una parte importante de la sociedad vasca. La frialdad de muchos vecinos de Eduardo Puelles, su reflexión, «La vida es así», es perfil de una tierra donde la lista de Batasuna quedó en tercer lugar en las pasadas elecciones europeas. Los terroristas querían un muerto en la mesa del lendakari socialista Patxi López y ya lo han conseguido. Su mensaje es claro: pese a un escenario diferente, con el PNV fuera del poder, la barbarie persiste y hay que volver a negociar. Los «soplones» del mundo radical permanecen al acecho. Los partidos políticos han vuelto a salir a la calle y es inevitable recordar aquel Espíritu de Ermua, tras el asesinato de Miguel Ángel Blanco. Recuperarlo es el gran reto del cambio político en Euskadi. En Arigorriaga, que en euskera significa piedra roja, la esperanza se ha truncado. Por eso, más allá de la unidad democrática, es preciso un fuerte cambio en la educación de las nuevas generaciones vascas. Una educación que destierre para siempre esa mezcla de resignación y miedo ante el mazazo de un crimen.