Sevilla

Un centro para las letras en el corazón de Sevilla

Un centro para las letras en el corazón de Sevilla
Un centro para las letras en el corazón de Sevillalarazon

En Mairena del Alcor, un municipio enclavado a unos 30 kilómetros de Sevilla, su biblioteca, que lleva el nombre de José Manuel Lara, se ha convertido en «la biblioteca». Como si hubiera tomado el relevo contemporáneo del ágora griego, este centro se ha erigido como un lugar de encuentro para quienes, desde la cultura, intentan explicarse el mundo. En este espacio público, conviven el debate apasionado, la reflexión tranquila, la pausada lectura, el estudio y ese enriquecerse a golpe de click que nos ofrece el ventanal de internet. La biblioteca de Mairena del Alcor inauguró un nuevo concepto de centro público para la cultura. Amén de su incrustación en el Centro Cultural de la Villa y el Conocimiento de Mairena del Alcor, la biblioteca es una joven perla que ha despertado las inquietudes culturales de numerosos vecinos del municipio y de toda la comarca sevillana de Los Alcores. Caracterizada por su amplio patrimonio natural y paisajístico, por su herencia flamenca y por su caserío tradicional, la biblioteca representa, desde su apertura, un signo de modernidad cultural que «ordena» la amplia vida cultural de una población que se ha asomado tanto a los libros como a su fértil tierra. La Biblioteca José Manuel Lara ha supuesto, de este modo, «un nuevo concepto de espacio cultural en el que toman especial relevancia la comunidad educativa y los ciudadanos», según presumen sus responsables. Un sitio donde los contenidos, sus fondos documentales y los métodos de acceso a los mismos son fruto de la unión de administraciones públicas como el Ministerio de Cultura, la Consejería de Cultura y el Ayuntamiento, además de fundaciones privadas como la que encabeza José Manuel Lara. Este templo de las letras goza de una gran amplitud horaria -de lunes a sábado de 8:30 a 14:30 y de 16:00 a 22:00 horas-, lo que hace atractivas sus instalaciones para los estudiantes, además permite el acceso al material necesario para el desarrollo de las tareas como complemento a su formación. Alta tecnología Las estancias están dotadas de una tecnología que dispone y propone medios para acceder a los contenidos, ya sea en CD, DVD o cualquier otro soporte. Otro de los novedosos recursos tecnológicos con los que cuenta es el portal web, que posibilita el acceso al catálogo o la renovación de préstamos, los puestos de acceso a internet, la red wifi y los recursos educativos digitales basados en los contenidos del banco Planeta, que configuran una biblioteca virtual en los centros escolares a través de una red de fibra óptica. En cuanto a secciones, la sala de consulta de publicaciones periódicas ofrece todos los rotativos provinciales de la jornada, además de un amplio conjunto de colecciones y revistas de carácter cultural, histórico, literario, educativo y musical, entre otros temas de interés. Los más pequeños cuentan con un área infantil que se sitúa junto a la zona de consulta de publicaciones periódicas; los atractivos de esta zona no dejan de ser llamativos para niños y niñas o cualquier persona que quiera consultar la prensa de la jornada. Destacan también las salas de estudio y de lectura, con más de 1.200 metros de estanterías, hemeroteca, discoteca, fonoteca, sala de videoconferencia, sala de audición y sala de visionado multimedia que cuenta con 10 pantallas planas. Esta sala utiliza el dispositivo denominado «Set top box» o descodificador que convierte la señal DTV en analógica, y «Red de distribución de contenidos», que soluciona técnicamente el acceso simultáneo de distintos usuarios a un mismo contenido. Estos servicios configuran a la biblioteca mairenera como líder en préstamo de servicios. De la misma forma, ofrece actividades como las sesiones de cuentacuentos o el Club de Lectura, infantil y de adultos. Además, cuenta con una biblioteca intercultural de 500 libros en 16 idiomas, con lo que se ofrece el acceso a la población inmigrante y minorías étnicas, lingüísticas y culturales al servicio bibliotecario al mismo nivel que el reto de los ciudadanos. El centro cultural fue inaugurado en noviembre de 2007 por el entonces ministro de Cultura, César Antonio Molina, y el presidente de la Fundación José Manuel Lara, José Manuel Lara Bosch, quien además donó un número considerable de los volúmenes disponibles. Además, se comprometió a aportar quinientos nuevos títulos cada año, procedentes de las novedades editoriales del Grupo Planeta.