Disturbios

Una turba en Sudán exige que se ejecute a la maestra británica

La Razón
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Jartum- La profesora británica Gillian Gibbons, condenada en Sudán por haber llamado Mahoma a un oso de peluche, fue trasladada por las autoridades desde la cárcel de mujeres de Omdurman a un lugar secreto por su seguridad. El traslado respondió a las amenazas proferidas contra la profesora en una multitudinaria manifestación celebrada ayer en la capital sudanesa, en la que una turba amenazó con despedazar a la mujer con sus cuchillos si la encontraban.

Miles de sudaneses se manifestaron tras la oración del viernes para protestar contra lo que consideran una «tibia sentencia» contra la profesora, y también pidieron que sea fusilada. Los manifestantes blandieron cuchillos y palos en la Plaza de los Mártires de Jartum, frente a la sede del Palacio Presidencial, donde se reunieron un día después de que un tribunal sudanés hallase culpable a Gibbons de ofender a la religión islámica y la condenase a 15 días de cárcel y a salir del país.

Los manifestantes, que no lograron llegar a la Embajada británica, corearon lemas como «¡Deshonra para Reino Unido!» o «¡Matadla a tiros!». Gibbons fue detenida el domingo después de que el Ministerio de Educación recibiera una queja porque había permitido a sus alumnos de siete años ponerle el nombre de Mahoma (Mohamed, en árabe) a un oso de peluche.