Ventas Ilegales

Una vieja frase servía para describir lo caro que podía resultar un servicio o un producto. Era aquella que decía «me ha costado un riñón». El precio final siempre quedaba en el aire. Ahora no. Desde hace unos días ya sabemos qué vale un riñón. El precio se lo ha puesto un señor de Sevilla. Ahogado por las deudas, en concreto por la hipoteca, ha decidido vender uno de sus órganos renales. 100.000 euros es el precio de su riñón.El anuncio, que no es una novedad en Internet, ahora ha llamado la atención porque surge a propósito de la crisis económica que vive el país. Una situación que cuando llega a extremos insalvables puede provocar que una persona honrada, sana y joven busque cualquier recurso para obtener dinero. Antes que delinquir, cualquier cosa. Como confirma la directora de la Organización Catalana de Trasplantes, la doctora Rosa Deulofeu, la venta de órganos vitales, totalmente ilegal en España, no es nueva. Lo que hace unos años fue una leyenda urbana ahora se ha convertido en un mercado próspero. Países como Pakistán, Perú, China o Índia son los escenarios donde de forma precaria se realizan los trasplantes. Los propietarios de los órganos pueden estar en cualquier parte. Una llamada o un e-mail y un viaje bastan para cerrar la operación. Antaño el diablo siempre estaba dispuesto a comprar un alma en venta. Hogaño son unos pobres diablos los que ponen en el mercado virtual sus órganos para salir del infierno de la miseria.