Organización Trump

La empresa de Donald Trump está en peligro de quebrar

Los fiscales de Nueva York podrían presentar cargos penales contra la Organización Trump por diversos “beneficios lucrativos”

La investigación comenzó después de que Michael Cohen pagara dinero por silenciar a dos mujeres que aseguraban haber tenido relaciones sexuales con Trump. AP
La investigación comenzó después de que Michael Cohen pagara dinero por silenciar a dos mujeres que aseguraban haber tenido relaciones sexuales con Trump. APJacquelyn MartinAP

No están siendo buenos tiempos para el expresidente de Estados UnidosDonald Trump. Después de que el pasado mes de noviembre perdiera las elecciones a la Casa Blanca ante Joe Biden, ahora se enfrenta a un golpe financiero y políticamente paralizante, debido a que su empresa se enfrenta a posibles cargos criminales.

Los fiscales de Nueva York consideran presentar cargos penales contra su empresa familiar esta semana, en relación con los impuestos a los beneficios lucrativos que otorgaba a los altos ejecutivos, tales como automóviles, matrículas escolares o apartamentos. Sin embargo, la acusación no iría contra el magnate estadounidense, sino contra la empresa como persona jurídica, por lo que podría llevar a la quiebra a la compañía por dañar sus relaciones con bancos y otros socios comerciales.

“Los cargos son absolutamente escandalosos y sin precedentes, si es que los cargos se presentan. Esto es solo para vengarse de Donald Trump”, dijo Ron Fischetti, abogado de la Organización Trump, a AP.

La investigación comenzó después de que el ex abogado y reparador de Trump, Michael Cohen, pagara dinero por silencio a dos mujeres que, pese a que el ex presidente lo desmentía, aseguraban que habían tenido relaciones sexuales con él, antes de las elecciones presidenciales de 2016.

Los fiscales también están examinando si el hijo de Allen Weisselberg, director financiero durante mucho tiempo de la Organización Trump, utilizó uno de los apartamentos en cuestión a bajo coste o sin coste alguno. También los vehículos alquilados de la familia Weisselberg o la matrícula de la escuela de sus nietos. Si hay algún punto que la fiscalía considere ilegal, la familia Weisselberg podría entrar en problemas. Y quizás, una condena o sanción en un hipotético juicio se vea reducida si Allen testifica contra Trump y los hijos del ex presidente, lo que metería también en problemas al ex presidente.

La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, asegura que está asignando dos abogados para investigar junto a Vance, que busca “una conducta delictiva posiblemente extensa y prolongada”. James está investigando una deducción fiscal de 21,1 millones de dólares, además de si la compañía infló los valores de algunas propiedades para obtener mejores condiciones en préstamos, así como bajar los valores para tener que pagar menos impuestos. También se investiga la compra de Seven Springs, una propiedad de 212 acres en las afueras de Manhattan que Trump adquirió en 1995.

“Es una caza de bujas, harán cualquier cosa para detenerme”, aseguraba el magnate estadounidense. “La Organización Trump ha hecho cosas que son una práctica estándar en toda la comunidad empresarial de Estados Unidos, y de ninguna manera es un crimen”.

Donald Trump está recibiendo más demandas, además de estas. La oficina del fiscal general del Distrito de Columbia, por ejemplo, investiga a la compañía por presunto uso indebido de más de un millón de dólares para un uso del espacio para eventos en el hotel Trump en Washington, durante la toma de posesión del que fuera el 45º presidente de los Estados Unidos en enero de 2017.

“Tener fiscales motivados políticamente, personas que en realidad fueron elegidas porque conseguirán a Donald Trump, es algo muy peligroso para nuestro país. Al final, la gente no lo tolerará. Recuerda, si me pueden hacer esto, ¡se lo pueden hacer a cualquiera!”, concluye Donald Trump.

Después de cuatro años en el mandato a los cuales no les ha faltado nada de polémica, el republicano perdió las elecciones contra el actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Hasta dos meses después no aceptó la derrota, presuponiendo de un posible recuento ilegal de votos. Tiene la intención de postularse como líder republicano y presentarse a las elecciones a la presidencia de 2024.