El caos del Brexit

Desde supermercados hasta restaurantes y fábricas: la escasez de productos y alimentos se agrava en Reino Unido

Las empresas de alimentación piden una solución urgente a Johnson para paliar la falta de mano de obra causada por el regreso de miles de ciudadanos de la UE a sus países

Las cadenas de supermercados en Reino Unido se quejan de que los productos se agotan
Las cadenas de supermercados en Reino Unido se quejan de que los productos se agotanTwitterLa Razón

Los problemas en la cadena de suministro continúan en Reino Unido y ya no solamente afecta a las cadenas de supermercados, hay más victimas: los restaurantes y las fábricas. Y es que la graveescasez de mano de obra, consecuencia de la salida de los trabajadores de la Unión Europea de Reino Unido tras el Brexit ha obligado a varias conocidas cadenas de restaurantes como Nando’s y KFC a cerrar establecimientos o a reducir su menú y puede que esta dramática situación deje a más de un británico sin comer pavo estas Navidades.

Ante la escasez de alimentos que se agrava en tierras británicas, las empresas de alimentación han pedido una solución urgente al Ejecutivo de Boris Johnson para paliar la falta de mano de obra causada por el regreso de miles de ciudadanos de la UE a sus países.

El rey de las hamburguesas, McDonald’s, anunció la pasada semana que de momento no podrá ofrecer batidos ni bebidas embotelladas en sus 1.250 establecimientos en Reino Unido, mientras que la cadena de restaurantes Nando’s tuvo que cerrar unos 50 locales la semana pasada por escasez de pollo, atribuida a la falta de trabajadores en las empresas proveedoras.

Otra cadena bastante conocida como KFC advirtió recientemente que las dificultades logísticas estaban provocando escasez de algunos productos del menú, al igual que un restaurante de alta gama llamado Novikov se está quedando sin carne de Wagyu.

En lo que se refiere a los supermercados, la cadena Iceland y su rival Co-Op también se quejan de que los productos se agotan. En la industria, las fábricas de automóviles tuvieron que interrumpir la producción debido a la escasez de componentes, lo que provocó una caída de las ventas del 30% en julio y una reducción de la producción a su nivel más bajo desde los años 1950.

Las pequeñas y medianas empresas también se vieron afectadas, especialmente en el sector de la construcción, donde algunas se están quedando sin materiales ni trabajadores. CBI, principal organización patronal de Reino Unido, afirma que las existencias de los minoristas se encuentran en su nivel más bajo desde hace casi 40 años.

Otras empresas, en cambio, intentan adaptarse a esta situación tan desesperante en Reino Unido. La cadena de supermercados Tesco o el gigante estadounidense Amazon, no tienen problema alguno en ofrecer bonificaciones para contratar a conductores y trabajadores de almacén que necesitan para servir a su clientela en Reino Unido.

Del mismo modo, las industrias cárnicas están valorando la posibilidad de asociarse con las cárceles para emplear a algunos presos en proceso de reinserción.