Escalada de tensión

Maduro, dispuesto a declarar la lucha armada contra Estados Unidos

Estados Unidos no ha dicho que tenga intenciones de atacar a Venezuela, pero Caracas asume que el país norteamericano avanza en una “estrategia de máxima presión”

Nicolás Maduro dijo que su gobierno considera la movilización de equipos de la Marina de Estados Unidos en el Caribe, anunciada como una operación antinarcóticos, como una amenaza directa a Venezuela. “Tenemos ocho buques militares y un submarino nuclear al frente, y 1.200 misiles apuntando a las cabezas de los venezolanos. Es lo que ellos han dicho” . Calificó la situación como una “amenaza extravagante, injustificable, inmoral y absolutamente criminal, sangrienta”.

Estados Unidos no ha dicho que tenga intenciones de atacar a Venezuela, pero Caracas asume que el país norteamericano avanza en una “estrategia de máxima presión”. Frente a ella, Maduro anunció que Venezuela desarrolla una estrategia de “máxima preparación”, con una etapa de “lucha no armada” de alistamiento, entrenamiento y diplomacia, y otra que sí lo estaría.

Si Venezuela fuera agredida, pasaría inmediatamente al periodo de lucha armada en defensa del territorio nacional, de la historia y del pueblo de Venezuela. Declararíamos constitucionalmente a la República en armas. Lucha armada y República en armas de norte a sur, de este a oeste, para garantizar la paz, la soberanía y el desarrollo del país en cualquier circunstancia que nos toque”, sostuvo en declaración a la prensa internacional.

Según el líder chavista aún existen dos canales de comunicación entre ambos gobiernos, aunque admitió que están “maltrechos” por culpa de “la diplomacia de las cañoneras, equivocada, errática, que le han impuesto al presidente Donald Trump”.

Maduro identificó a John McNamara, actual jefe de misión de la Oficina Externa de Estados Unidos para Venezuela, con sede en Bogotá, como uno de esos canales de contacto. Relató que conversó con él el día en que entregó a Washington a 10 prisioneros estadounidenses, a cambio de la liberación en El Salvador de 252 migrantes venezolanos.

“El señor McNamara vino acá ese día. Cuando habló conmigo se derritió, titubeaba, no podía ni hablar. Lo traté con dignidad, con respeto, y él me trató con deferencia especial”.

Desde el palacio presidencial en Caracas, el gobernante envió un mensaje al presidente de Estados Unidos para advertirle de que, a su juicio, el secretario de Estado ha tomado el control de la Casa Blanca.

“Usted tiene que cuidarse porque Marco Rubio quiere manchar sus manos de sangre suramericana, caribeña, con sangre venezolana. Lo quieren llevar a un baño de sangre y que su apellido se manche por los siglos de los siglos con una masacre contra el pueblo de Venezuela”, advirtió.

El gobernante venezolano anunció también que la milicia popular venezolana ya alcanzó 8,2 millones de integrantes con las jornadas de las últimas dos semanas, y que el alistamiento de civiles continuará, ahora de manera permanente. Maduro había ordenado hace más de dos semanas movilizar a 4,2 millones de milicianos. Esta semana, sostuvo, comenzarán los entrenamientos militares de los ya alistados.

En paralelo, el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino, tachó este lunes de “falsa” la denuncia hecha por Guyana el domingo sobre un ataque desde el lado venezolano a una patrulla que transportaba material electoral de ese país. Según Padrino, tales denuncias buscan crear un “frente de guerra”.