Defensa

Robots asesinos al estilo "Terminator": China ya tiene preparada el arma "especial" que usará su ejército

El gigante asiático innova con tecnología artificial para construir una alternativa militar a sus drones, tanques o misiles hipersónicos

China es una de las principales potencias militares del mundo sin ninguna duda, pues todas las pruebas, ensayos y presentaciones de armas lo han demostrado. Drones, tanques o misiles hipersónicos son solo algunos ejemplos del material con el que cuenta, así como tecnología nuclear o inteligencia artificial. Entre todo esto, ha sacado a relucir su "última y especial arma" que pretende dar a su ejército: los robots asesinos.

Era hace casi diez años cuando empezaba a relacionarse al gigante asiático con este tipo de tecnología. China ensayaba en 2015 el control de robots con la mente, una tecnología con evidentes aplicaciones a largo plazo en el mundo militar. Algo que parecía imposible poco a poco se ha transformado en real, pues las fuerzas chinas han estado trabajando para conseguirlo, algo que otras potencias como Estados Unidos no terminaba de elaborar.

El mes pasado, China ya dejó ver uno de sus "robots asesinos", un perro robótico montado en un arma fabricado por la empresa china Unitree Robotics. Por su parte, Moscú, que también estaba detrás de estas armas, ya había mostrado un perro modificado de Unitree Robotics, rebautizado como perro-robot M-81 y equipado con un lanzagranadas propulsado por cohete, en una feria de armas cerca de Moscú en 2022.

"Desafortunadamente, China parece estar avanzando rápidamente hacia la adquisición de robots asesinos, al igual que otras potencias militares importantes", explica a Newsweek Steve Goose, director de campañas de armas de Human Rights Watch, una ONG con sede en Nueva York que cofundó la campaña "Stop Killer Robot".

"La retórica de China en las reuniones diplomáticas sobre los robots asesinos, donde pidió restricciones a las armas autónomas, no se ha reflejado en sus acciones", añadió.

Este progreso desenfrenado ha suscitado numerosas advertencias de que las armas no humanas serían incapaces de respetar las leyes de la guerra y eliminarían la renuencia de los países a participar en conflictos por miedo a sacrificar tropas.

El sistema permite detectar y rastrear automáticamente personas, drones o vehículos, informando sobre objetivos potenciales a un operador humano que puede estar ubicado en cualquier parte del mundo.

Son similares a los Q-UGV que está evaluando el Cuerpo de Marines de Estados Unidos. El arma estadounidense puede ser empleada en diferentes tipos de misiones y tiene la capacidad de detectar y rastrear automáticamente y atacar a personas, drones o vehículos con el Sistema de Armas Remotas SENTRY.