El euroescéptico Boris Johnson se postula para suceder a Cameron

El extravagante alcalde de Londres, Boris Johnson, popularmente considerado como un potencial competidor de David Cameron para el cargo de primer ministro británico, dijo ayer que «con toda probabilidad» se presentará a las elecciones parlamentarias del próximo año en Reino Unido. Johnson hizo este comentario durante un discurso pronunciado en la sede de Londres del canal estadounidense Bloomberg, al presentar un informe elaborado por el experto financiero y asesor Gerard Lyons que defiende la viabilidad de una hipotética salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE). El anuncio de Johnson llegó hacia el final de su discurso, en el que planteó la posibilidad de que su país pudiera dejar la UE si el jefe del Ejecutivo británico no logra las prometidas reformas en la relación entre Bruselas y Londres.

El informe presentado ayer concluye que una hipotética salida británica de la Unión Europea es una opción «viable», algo con lo que Boris Johnson se mostró de acuerdo al apuntar que es una posibilidad «atractiva». La posición de Johnson contrasta con la postura sostenida por Cameron, que ha insistido en repetidas ocasiones en que quiere que Reino Unido siga dentro de la UE después de que esta institución apruebe una serie de reformas.

Para Johnson, el primer paso si quiere desafiar a Cameron como líder del Partido Conservador, sería ganar un escaño en Westminster. En los medios británicos se cree que Boris, como se le conoce popularmente, podría ser una alternativa en caso de que los conservadores fueran derrotados o fracasaran a la hora de asegurarse una mayoría en los Comunes en los comicios de 2015.

Durante años, Johnson ha negado que tuviera intenciones de presentarse como candidato, al mismo tiempo que alimentaba en los medios las especulaciones al respecto. «No tengo en mente ningún escaño en particular, pero creo que con toda probabilidad intentaré encontrar algún lugar que defender de cara a 2015», dijo ayer. Cameron dio la bienvenida a la decisión de Johnson, a pesar de que dará nuevamente rienda suelta a las especulaciones sobre su futuro como líder «tory». Cameron instó a Johnson en marzo a regresar a la política nacional. «Es una gran noticia que Boris esté planeando presentarse a las elecciones generales del próximo año. Siempre he dicho que quiero a mis jugadores estrella en la cancha», escribió el «premier» británico en su cuenta oficial de Twitter

Una encuesta publicada en junio mostraba que los votantes ven a Johnson como el mejor líder si Cameron dimitiera al frente del Gobierno británico. Ambos políticos asistieron al elitista colegio de Eton, aunque Cameron es dos años más joven que el alcalde de Londres. Además, los dos fueron miembros del Club Bullingdon, una sociedad exclusiva de la Universidad de Oxford conocida por su cultura bebedora.

Antes de ser alcalde de Londres, Johnson ejerció como parlamentario entre 2001 y 2008. Ha asegurado que si resultara elegido, compatibilizará su cargo como regidor de la capital inglesa, hasta que termine su mandato en el año 2016, con su escaño de parlamentario en Westminster. La noticia ha cogido por sorpresa a algunos de sus compañeros de filas. El diputado John Howell, que reemplazó a Johnson como representante de la circunscripción por Henley, reconoció ayer estar «bastante sorprendido». «Pensaba que iba a intentar un tercer mandato como alcalde de Londres. Ha hecho un gran trabajo», dijo Howell en declaraciones a la cadena británica BBC.

Perfil

Un conservador extravagante y ambicioso

Conocido por suscostumbres excéntricas, su ingenio afilado y su rebelde mata de pelo rubio, Boris Johnson, de 50 años, ha ganado popularidad más allá de la base tradicional del partido conservador. Hasta ahora ha vencido en dos elecciones como alcalde de Londres. También fue alabado por su papel en los exitosos Juegos Olímpicos celebrados en la capital inglesa en 2012, un acontecimiento que impulsó su perfil a nivel internacional. Johnson se ha construido un estilo de hombre cómico y caótico por sus apariciones públicas, aunque es reconocido como un político ambicioso. Cuando le preguntaron en 2010 si un día se convertiría en el primer ministro, respondió: «Tengo más posibilidades de ser decapitado por un Frisbee o de quedar encerrado en una congelador».