El Gobierno confirma 58 muertes en la cárcel y el desalojo de reos tras el motín

La ministra venezolana para el Servicio Penitenciario, Iris Varela, confirmó hoy que 58 personas murieron y 46 permanecen hospitalizadas tras el motín registrado el viernes en una cárcel del oeste del país, de la que fueron desalojados los reclusos.

Dos días después de la tragedia que sacudió el Centro Penitenciario de la región Centro Occidental, Varela recorrió ante las cámaras de la televisión estatal el recinto y anunció en una conferencia de prensa que se trasladó a la mayoría de los casi 2.500 internos y que sólo 161 siguen en una de las áreas del penal.

"Tenemos un lamentable saldo de personas que perdieron la vida tanto aquí en el recinto como después producto de las heridas (...) de 57", afirmó la funcionaria y señaló que a ese "parte doloroso"se suma un cuerpo calcinado hallado hoy en el penal.

Antes de conocerse la cifra oficial, el director del Hospital Central de Barquisimeto, la capital de Lara, Ruy Medina, había informado ayer a Efe de que 61 personas murieron y otras 120 resultaron heridas durante el motín.

La titular del Servicio Penitenciario mencionó entre los fallecidos a un pastor evangélico y un integrante de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), fuerza que, aseguró, solo brinda apoyo "para asegurar las áreas".

Desde la cárcel de Uribana, situada en el estado Lara (occidente), la funcionaria señaló que aún permanecen hospitalizadas "con su debido tratamiento"46 personas y que dentro del recinto se encuentran otras 49 que fueron dadas de alta y están siendo asistidas por personal médico oficial.

Entre los heridos, aseguró, se encuentra un pastor evangélico que trabaja en la comisión pastoral creada por su despacho y un funcionario del grupo de respuesta inmediata de custodia.

Consultada sobre lo ocurrido al interior del penal, la ministra aclaró que no se registró enfrentamiento entre autoridades y reos y que la "anunciada"requisa "aún no se ha hecho".

Atribuyó la violencia a una "resistencia"de "líderes negativos"del penal, que permanecían ocultos y manejaban "otro tipo de información"y salieron a disparar "a mansalva".

"Hubo una resistencia ante lo que era inminente que era que nos estábamos preparando para efectuar una requisa en sana paz", subrayó Varela y sentenció que para una inspección de ese tipo se requiere de "todo un protocolo".

Aseguró que tras el motín fueron trasladados 2.003 hombres y 132 mujeres y que 161 permanecerán en una zona conocida como "el rodeíto", a la vez que anunció que desde mañana se iniciará una "revisión exhaustiva"de los procesos judiciales de los reclusos de Uribana para otorgarle beneficios a aquellos que les corresponda.

"Hoy estamos diciendo y lo anunciamos así al país: 'acabamos con el mito de Uribana'. Estamos liberando de 'pranes' (líderes de los presos) al estado Lara", añadió Valera, quien admitió que esos "líderes negativos"los sacaban "a punta de disparo"de esa cárcel.

Confirmó que ese lugar "se va a reparar".

Previamente, Varela habían informado en su cuenta en la red social Twitter que había concluido la salida de reos.

"Concluye desalojo de los privados de libertad de la Cárcel de Uribana! Ahora a la reconstrucción!", señaló un mensaje en @irisvarela y confirmado a Efe por fuentes de su despacho.

Difundió, además, varias fotografías de la salida de algunos de los reos y de funcionarios que, según otro mensaje en la red social, efectuaron la primera inspección "para asegurar el desalojo total!".

Al reaccionar a lo ocurrido en Uribana, el líder opositor Henrique Capriles dijo hoy que el problema penitenciario no se resuelve cerrando una cárcel y consideró "terrible"lo ocurrido.

"Si en una cárcel pasa eso qué puede quedar para las personas que están en las calles. Si tenemos un Estado que no es capaz de ofrecer seguridad dentro de un recinto penitenciario qué puede quedar para el ciudadano común", se preguntó el también gobernador de Miranda.

Advirtió de que este "no es un problema de las víctimas", sino que "tiene que ser un problema de todos".

El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) ha indicado que en 2011 murieron 560 presos y 1.457 resultaron heridos en las cárceles del país, mientras que en el primer semestre de 2012 la violencia dejó 304 presos muertos y otros 527 heridos.