Bruselas

Encuentran muerto a un joven desaparecido en circunstancia similar al vasco Egiluz

La policía belga ha encontrado el cuerpo sin vida de Germain Steven Mboyo Bombole, un joven de origen africano 24 años desaparecido en Amberes (norte de Bélgica) el pasado febrero en circunstancias similares a las del vasco Hodei Egiluz, confirmaron hoy a Efe fuentes de la organización Childfocus.

El cadáver fue localizado el miércoles en uno de los muelles del río Escalda, indicaron las fuentes, que añadieron que está pendiente aún la "identificación oficial"del joven, que tendrá lugar una vez se lleve a cabo la autopsia.

"No hay ninguna duda de que se trata de esa persona", añadieron las fuentes, que señalaron, por otra parte, que "no hay indicios de que el joven fuera víctima de un hecho delictivo, aunque todavía falta por de determinar la causa de su muerte".

El caso de Germain Steven Mboyo llamó la atención por las similitudes con la desaparición del joven vasco, aunque tanto la organización Childfocus como la Fiscalía indicaron desde el primer momento que no había podido establecer una conexión entre ambos casos.

"No hay indicaciones de que exista un vínculo de ningún tipo. Hay coincidencias en el perfil de la persona, el lugar y la hora de la desaparición, así como en las circunstancias, porque ambos habían salido con amigos", explican desde Childfocus.

No obstante, añaden, los parecidos "solo se dan en la forma, no en el contenido".

El joven de origen africano fue visto por última vez el pasado 21 de febrero de madrugada en las inmediaciones de una calle cercana al canal, la misma zona donde desapareció Egiluz.

Bombole fue con sus amigos a una conocida discoteca de la ciudad de la que se fue sin despedirse.

Hodei Egiluz, procedente de Galdakao, también desapareció en Amberes a altas horas de la madrugada tras salir con sus amigos.

Egiluz, titulado en Ingeniería Informática, se había trasladado a Amberes en abril de 2013 para realizar unas prácticas profesionales en la empresa local Createlli, que en junio le ofreció un contrato de trabajo.

Las autoridades belgas buscaron sin éxito su cuerpo en los muelles del río Escalda y aseguraron que contaban con suficientes indicios para creer que fue víctima de un hecho criminal y que por tanto no desapareció voluntariamente.

Varias personas fueron detenidas en relación al caso por estar en posesión de objetos personales del joven, como su teléfono móvil o su cartera.

Tres de ellas siguen en prisión preventiva, pero la falta de avances en la investigación sobre esta pista hizo que el caso Egiluz fuese transferido a la Fiscalía de la ciudad.