EE UU
EE UU golpea al programar nuclear de Pyonyang, que promete responder "de forma apropiada"
Washington sancionará a ocho personas y dos empresas por un presunto blanqueo de dinero procedente de delitos cibernéticos

Estados Unidos ha vuelto a poner en el punto de mira a Corea del Norte. El pasado martes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció que sancionará a ocho personas y dos empresas, entre las que figuran banqueros norcoreanos, por un presunto blanqueo de dinero procedente de delitos cibernéticos. Este dinero habría sido utilizado para financiar el programa de armas nucleares de Pyongyang.
Según desveló POLITICO, los actores sancionados participaron en un plan masivo para robar fondos de empresas estadounidenses, haciéndose pasar por empleados tecnológicos que trabajaban a distancia. En los últimos tres años, habrían logrado hacerse con más de 3.000 millones de dólares, principalmente en criptomonedas. "Los piratas informáticos patrocinados por el Estado norcoreano roban y blanquean dinero para financiar el programa de armas nucleares del régimen", explicó el secretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, "al generar ingresos para el desarrollo armamentístico de Pyongyang, estos actores que amenazan directamente la seguridad de Estados Unidos y la seguridad mundial", agregó.
La medida fue respondida este jueves por Pyongyang. El viceministro de Exteriores norcoreano, Kim Un-chol ha asegurado que con las sanciones, la administración Trump "ha demostrado claramente su postura de seguir siendo hostil" hacia Corea del Norte, y descarta que vayan a dar "fruto". En este sentido, el vicanciller, a cargo de las relaciones del régimen con Washington, advirtió que este "será paciente y responderá de manera adecuada", sin ofrecer más detalles al respecto.
Sanciones internacionales
El programa nuclear de Corea del Norte lleva años sometido a numerosas sanciones internacionales, que van desde la prohibición del suministro de armas, materias o tecnología que pueda ser usada para su desarrollo, entre otros aspectos. Aun así, Pyongyang parece determinada a evadir este veto. A finales de septiembre, Corea del Seúl alertó que su vecino del norte podría poseer hasta dos toneladas de uranio altamente enriquecido, "suficientes para fabricar un número enorme de armas nucleares", denunció el ministro de Unificación, Chung Dong-young a los periodistas.
A pesar de las sanciones y acusaciones cruzadas, Donald Trump se ha mostrado en numerosas ocasiones favorable a reunirse con su homólogo norcoreano, Kim Jong-un. De hecho, se llegó a barajar la organización de una cumbre bilateral durante la gira asiática de Trump, que le llevó a pasar por Seúl en el marco del foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). Según reveló el Servicio Nacional de Inteligencia (NIS) surcoreano, habrían detectado señales de que Pyongyang estuvo gestionando un encuentro entre su líder y el presidente de EE UU durante esta visita, pese a que este finalmente no se materializó. El NIS no descarta que la cumbre se celebre finalmente el año que viene, tras unos ejercicios militares entre Seúl y Washington previstos para marzo de ese año.