Unión Europea

Así es el nuevo impuesto europeo que llevará la gasolina y el diésel a los 2 euros por litro

Entrará en vigor en 2027 y afectará a empresas, autónomos y particulares en toda la Unión Europea

Una mujer paga en una gasolinera autoservicio en Sevilla
Una mujer paga en una gasolinera autoservicio en SevillaJoaquin CorcheroEuropa Press

En los últimos años, los precios de los carburantes en España han mostrado una tendencia claramente al alza, impulsados por varios factores, como las tensiones geopolíticas en los mercados del petróleo. Aunque los precios bajen, los españoles siguen pagando más que hace un año en combustible. A ello se suma la creciente presión de las políticas medioambientales europeas, que buscan acelerar la transición hacia una economía más verde y menos dependiente de los combustibles fósiles.

En este contexto, Bruselas prepara un nuevo paso que podría cambiar de forma significativa el coste de llenar el depósito. Se trata de la creación del ETS2, con el objetivo es reducir las emisiones de dióxido de carbono, pero en la práctica podría traducirse en una subida considerable del precio de la gasolina y el diésel a partir de los próximos años. La medida, que forma parte del ambicioso plan europeo para alcanzar la neutralidad climática en 2050, ha generado tanto expectación como preocupación entre los consumidores.

¿Qué es el ETS2 según la UE?

El parlamento europeo ya se prepara para conseguir neutralidad climática en 2050. Para ello, han lanzado un "nuevo sistema cubrirá y abordará las emisiones de CO2 procedentes de la combustión de combustibles en edificios, transporte por carretera y sectores adicionales", conocido como ETS2. Según señala la UE, el precio del carbono fijado por este impuesto, incentivará las inversiones en movilidad de bajas emisiones, es decir el uso de coches eléctricos.

No es un impuesto directo, sino un sistema de mercado regulado. Los distribuidores de combustible deberán adquirir derechos de emisión, y el precio de esos derechos fluctuará según la oferta y la demanda. Algunos expertos, piden prudencia y recuerdan que aún está en fase de desarrollo. "Los ajustes serán limitados y previsibles, probablemente de apenas unos céntimos por litro", señala Manuel Montero, director general del Grupo Moure.

Cuánto subirá el precio del carburante

Con la aprobación de este impuesto, la gran pregunta es cuánto se encarecerá el combustible en comparación a los actuales precios. Las primeras estimaciones apuntan a una subida de entre el 25 y el 30% en el precio del combustible, lo que supondría entre 20 y 45 céntimos más por litro. De cumplirse esas previsiones, la gasolina y el diésel podrían acercarse a los dos euros por litro, un precio que en España solo se alcanzó durante el inicio de la guerra de Ucrania.

Precio del diésel en una gasolinera, a 27 de octubre de 2022, en Madrid (España)
Precio del diésel en una gasolinera, a 27 de octubre de 2022, en Madrid (España)Carlos LujánEuropa Press

Siete veces más que en Estados Unidos

La puesta en marcha del ETS2 está prevista para enero de 2027, aunque Bruselas contempla un periodo de adaptación que podría extenderse hasta 2028 si los precios energéticos suben demasiado rápido. A partir de entonces, el coste del carbono empezará a repercutirse en el precio del combustible de forma progresiva.

El creador de contenido Pedro, conocido por su canal Motor 22 CV, ha sido una de las voces más críticas con la medida. En uno de sus vídeos más recientes, asegura que esta regulación será especialmente dura para autónomos y pequeñas empresas, ya golpeados por los altos costes energéticos. Según sus cálculos, el encarecimiento será progresivo: unos 25 céntimos por litro en 2027 y hasta 50 céntimos más hacia 2030.

Sin embargo, lo más impactante de su análisis es la comparación con Estados Unidos. "En términos reales, la gasolina nos saldrá seis o siete veces más cara que a un americano", señala Pedro. En cambio, desde Bruselas defienden que el ETS2 es esencial para alcanzar la neutralidad climática y que la electrificación del transporte será la alternativa más sostenible a medio plazo.