Italia rescató del mar en un año a 163.000 inmigrantes que se dirigían a Europa

Italia rescató en un año a más de 163.000 migrantes que intentaban cruzar el Mediterráneo y llegar a Europa, dijo hoy la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Esta cifra, contabilizada hasta el pasado 30 de noviembre, proviene del Ministerio del Interior de Italia, que ha comunicado que en noviembre se rescataron a casi 10.000 personas, poco más de una tercera parte de los 26.107 de septiembre, recordó el portavoz de la OIM, Joel Millman, en Ginebra, sede de la entidad.

Los expertos indicaron que en noviembre "hubo muchos días de mal tiempo", lo que generalmente impide o disuade la salida de las embarcaciones de las costas del norte de África y más recientemente de Turquía.

Estos viajes se reducen habitualmente durante el invierno, pero la OIM ha constatado que "a pesar de las condiciones marítimas más duras, los traficantes siguen encontrado pasajeros".

Los testimonios indican que, desde Turquía y si hay más de quinientos migrantes, los traficantes cobran 4.500 dólares por personas, pero si hay menos el precio puede subir a 6.000 dólares.

Según Naciones Unidas, este año cerca del 50 % de los inmigrantes procedían de Siria -en guerra civil desde 2011- y de Eritrea, donde la población sufre graves violaciones de los derechos humanos y miles de jóvenes huyen de un servicio militar de tiempo indefinido.

En noviembre llegaron a Italia 3.000 sirios, que elevan a 40.000 los contabilizados desde enero, lo que representa una tercera parte de todos los inmigrantes.

El número de eritreos cayó en noviembre a 300, aunque este año han llegado unos 34.000, según las autoridades italianas

"Últimamente los sirios llegan en su mayoría en embarcaciones que parten de Turquía, mientras que los que llegan de Libia son mayoritariamente de África subsahariana", precisó el responsable de la OIM en Italia, Federico Soda, citado en un comunicado.

Los datos revelan también que se ha duplicado este año -con respecto al año anterior- las llegadas de migrantes de Mali, Nigeria, Gambia, Palestina y Bangladesh.

La OIM reveló que, por primera vez, ha encontrado entre los inmigrantes refugiados huidos de Kobane, la localidad del norte de Siria muy próxima a la frontera con Turquía, sitiada durante meses por las fuerzas del grupo islamista Estado Islámico.

Los traficantes les han cobrado 6.000 dólares por persona mayor de siete años para realizar la travesía desde Turquía.