Londres

Los Windsor, la monarquía más cara del mundo

La Casa Real británica gastó 45 millones de euros en 2013. El mantenimiento de las residencias supone una tercera parte

El hombre que no dormía con la Reina
El hombre que no dormía con la Reinalarazon

La monarquía británica costó el año pasado al contribuyente casi 45 millones de euros. Como todos los años, Buckingham Palace hizo ayer públicas sus cuentas y, aunque el extenso documento de 130 páginas puso de relieve que los gastos habían aumentado más de dos millones de euros, en la práctica, mantener a la familia de la reina Isabel II supone al ciudadano 70 céntimos de euro. Los números constatan que la Casa de Windsor es la monarquía más cara del mundo. Pero también es la más transparente.

Desde los años noventa, tras la gran crisis que atravesó la institución, la monarca está obligada a publicar un informe anual con el balance de sus ingresos y gastos. Cualquier ciudadano puede consultar todos los detalles a través de internet. Más de 150 páginas revelan hasta las libras empleadas en peluquería.

Por otra parte, los fondos públicos que recibe la familia real son objeto de escrutinio en el Parlamento. El sistema por el cual el Gobierno asigna el presupuesto se modificó el 1 de abril de 2013. En lugar de recibir una cantidad fijada cada diez años por adelantado, la soberana recibe ahora un 15% de los beneficios anuales del llamado Crown Estate, que engloba las propiedades públicas de la monarca, entre otras, la céntrica y comercial arteria londinense de Regent Street, el parque Windsor Great o el hipódromo de Ascot. El valor total se estima en más de 8.000 millones de euros. Por otra parte, la reina de Inglaterra cuenta con multitud de propiedades privadas que están fuera del escrutinio público.

En esta ocasión, ha sido precisamente el mantenimiento de las residencias lo que ha hecho subir la factura. El gasto se incrementó en 5,2 millones de euros hasta los 16,5 millones de euros, un 45% más, lo que incluyó la rehabilitación de la nueva vivienda del príncipe Guillermo, su esposa Catalina y el hijo de ambos, el príncipe Jorge.

La reconversión del apartamento 1 A del Palacio de Kensington en Londres, que tiene veinte habitaciones, ha costado 5,6 millones de euros, incluido el precio de eliminar el asbesto que había en el edificio. Según fuentes de palacio, Guillermo y Catalina han pagado de su bolsillo el mobiliario y una nueva cocina y hacen «grandes esfuerzos» para reducir el coste para el contribuyente. Esta fuente aseguró también que la vivienda «no es opulenta» y se ha hecho «a un nivel muy confortable, pero corriente».

Otros costes fueron para eliminar el asbesto del sótano del Palacio de Buckingham, residencia oficial en Londres de la reina Isabel II, y la renovación del tejado de la biblioteca del castillo de Windsor. El responsable de las finanzas reales, Alan Reid, afirmó que, quitando los gastos de mantenimiento de las residencias (más de un tercio del total), la financiación de la monarquía ha caído un 8% en términos reales en los últimos dos años. Reid subrayó que se intenta llevar a cabo «una operación lo más eficiente posible» y que, en su opinión, se hace un buen trabajo para optimizar la rentabilidad.

Las cuentas también indican que la Casa Real británica realizó en el último año fiscal casi 3.000 viajes con un coste de 5,2 millones de euros, 0,4 millones de euros menos que el año anterior. El príncipe Carlos, heredero al trono, gastó en desplazamientos 1,24 millones de euros, incluidos 540.000 euros en un viaje a India con su esposa, la duquesa de Cornualles, y 317.000 euros para asistir al funeral del líder surafricano Nelson Mandela.

Por otra parte, el coste de mantener al personal de servicio de la cas real británica ascendió a 22,6 millones de euros, un descenso de 124.000 euros al cambio actual comparado con el ejercicio anterior. El presupuesto del Estado para la monarquía se cifró en 2013-2014 en 45 millones de euros, por lo que quedan 500.000 euros que se guardarán en reserva.