Maduro gana en votos, pero pierde las grandes ciudades

Venezuela amaneció ayer como estaba antes de las elecciones del domingo: polarizada y caótica. Tanto el Gobierno como la oposición analizaron los resultados como una victoria, según se mire. En cualquier caso, los que perdieron son los venezolanos, que tras la resaca electoral volvieron a hacer grandes colas para comprar leche, aceite y harina. La inflación y la posible devaluación volvieron a la primera plana de los periódicos. Los liderados por el presidente, Nicolás Maduro, salieron victoriosos en el total de los votos y en el número de alcaldías. Sin embargo, La Mesa de la Unidad no sólo aumentó a 55 los municipios que controlaba –antes 52–, sino que además obtuvo victorias en regiones altamente estratégicas como Barinas, tierra natal del fallecido ex presidente Hugo Chávez. Aunque el oficialismo se volvió a imponer en las urnas, la oposición cada vez más acrecienta y refuerza su presencia en los sectores más influyentes. De esta manera, la oposición se hizo con el control de las cinco ciudades más pobladas del país: mantiene el distrito metropolitano de Caracas y Maracaibo (noroeste), con el 51,8 de los votos, consideradas las joyas de la corona, le arrebató Valencia (norte), con el 55,87%, el municipio Iribarren de Barquisimeto (noroeste), con un 53,12% y San Cristóbal (noroeste), con 67,86%. Si bien, en números, el chavismo se impuso en más municipios, las estadísticas marcan que en términos de votantes hubo una gran paridad. Si a los votos del PSUV se suman los de los de sus aliados, el chavismo aglutina el 49,2%, frente al 42,7% de la oposición. De las 13 capitales en las que se impuso el chavismo residen 4.801.183 habitantes, mientras que en las ocho de la oposición acumula 4.691.255.

Acusación de juego sucio

La campaña organizada para las elecciones del domingo fue, según el rector opositor del Consejo Nacional Electoral, Vicente Díaz, «la más ventajista de la historia de Venezuela». Antes de las elecciones, Maduro decretó leyes para rebajar los precios de diferentes productos en el mes antes de Navidad, celebración que además adelantó de manera oficial. Las medidas, tachadas por la oposición de «electoralistas», subieron la popularidad del mandatario. «La próxima semana profundizaremos en las acciones económicas, anunciaremos nuevas medidas», señaló el presidente desde la caraqueña plaza Bolívar tras conocerse los primeros resultados. Pero, a pesar del ventajismo, la maquinaria y las medidas económicas, el chavismo no arrasó en las elecciones, y esto, para muchos, es un síntoma de que el Gobierno cuenta con una amplia masa de críticos que no da su brazo a torcer. «El resultado no es un desastre para la oposición», dice Anabella Abadi, analista de la consultora política ODH Grupo Consultor, «pero tampoco es lo que se esperaban». La oposición ha ganado un espacio simbólico con el que podrá gobernar y demostrar que las cosas se pueden hacer distintas. Sin embargo, no ganaron el plebiscito que ellos mismos plantearon y ahora, dicen algunos observadores, tendrán que aferrarse a ese espacio sin la expectativa de unas elecciones en el mediano plazo: las próximas serán las parlamentarias de fines de 2015. Abadi recuerda que Capriles «ha hecho un enorme esfuerzo en esta campaña» en la que leestruyeron una tarima donde iba a hablar, trataron de incendiar su camioneta y detuvieron a su jefe de giras sin dar explicaciones.

HENRIQUE CAPRILES

LÍDER DE LA OPOSICIÓN

La Mesa de la Unidad aumentó su presencia en hasta 55 municipios y se ha hecho con el distrito de Caracas y Maracaibo, así como con Valencia e Iribarren de Barquisimeto.

42,7%votos

NICOLÁS MADURO

PRESIDENTE DE VENEZUELA

En el área metropolitana de Caracas, el oficialismo tan sólo consiguió el municipio Libertador. Sin embargo, se hizo con 196 alcaldías, frente a las 53 que consiguió la oposición.

49,2%votos