Armamento

Israel tiene 1.400 tanques Merkava disponibles para usar en situación de guerra

El famoso carro de combate israelí es un símbolo de la capacidad industrial y tecnológica del complejo militar hebreo

Carros israelíes Merkava IV en los Altos del Golán
Carros israelíes Merkava IV en los Altos del GolánATEF SAFADIAgencia EFE

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) son uno de los ejércitos más modernos del mundo. Además de su potencial aéreo, atesoran una gran experiencia en el uso de vehículos de combate en el campo de batalla y en la denominada guerra asimétrica. Su icónico carro de combate es el Merkava, fabricado íntegramente en Israel, que es en realidad una familia de tanques que surgió poco después de la guerra de Yom Kippur de 1973, de la que ahora se han cumplido 50 años. Se utilizó en la guerra del Líbano de 1982, donde se impuso a los T-62 de origen soviético, y en media docena de conflictos desde entonces.

Ahora, decenas de carros Merkava están estacionados en las fronteras con Gaza, esperando quizá luz verde de los altos mandos israelíes para entrar en el norte de la Franja, donde les espera una guerra de guerrillas con miles de combatientes de Al Qassam, el brazo armado de Hamás.

Las fuerzas blindadas de Israel usan a diario unos 490 tanques Merkava, convertido en un símbolo de la potencia industrial y tecnológica israelí. Unos 330 de estos carros son los Merkava IV más modernos. De la versión anterior, los Merkava III, existen unos 160. Según el portal militar Defense 24, otros 660 Merkava III y 220 Merkava IV se encuentran en almacenes, lo que significa que casi 1.400 vehículos pueden estar disponibles para participar en una guerra como la que se avecina.

En todos estos años, el Merkava ha experimentado varias mejoras con la introducción de modelos que tienen como objetivo aumentar su eficacia, pero sobre todo, mejorar la protección.

La variante Merkava I original, que entró en servicio en 1979, pesaba alrededor de 60 toneladas y tenía una velocidad máxima en carreteras de 46 kilómetros por hora. En 1983, las FDI comenzaron a recibir variantes avanzadas del Mk II, que siguió usando el cañón 105 mm y un mortero de 60 mm, pero que fue adaptada a la guerra urbana con un blindaje y componentes del tren motriz mejorados. La variante Mk III, de 1989, fue la primera en incorporar un cañón principal de 120 mm. El más moderno, el Merkava IV, con un coste de 4,5 millones de dólares, presentó un nuevo diseño, sensores mejorados, gestión de batalla y capacidades de intercambio de datos.

El Merkava IV, presentado en 2004, tiene un diseño único con un espacio que permite el acople de hasta ocho pasajeros además de una tripulación de cuatro, incluso puede actuar como una ambulancia blindada si es necesario. Destaca su sistema de protección Trophy, un escudo que funciona mediante el uso de radares montados en vehículos para rastrear y clasificar los proyectiles enemigos. Así, cuando se identifica un misil rival, el tanque dispara pequeños proyectiles explosivos que destruyen la munición sin dañar el carro de combate.

Trophy demostró su eficacia en 2011, cuando un Merkava equipado con el sistema neutralizó una granada propulsada por cohete disparada por tropas palestinas desde Gaza.

El diseño del carro Merkava le hace único entre los principales tanques de batalla del mundo. A diferencia de la mayoría de los carros modernos, el motor del Merkava está ubicado en la parte delantera del casco, quedando mejor protegido del fuego enemigo, mientras que la torreta está ubicada en la parte trasera.

El fabricante israelí también desarrolló un casco de realidad virtual “Iron View” que permite a los miembros de la tripulación ver más allá del casco para obtener una visión de 360 ​​grados del campo de batalla.

Las evoluciones han permitido que el Merkava IV Barak sea el primer carro de combate del mundo que utiliza software basado en inteligencia artificial en su sistema de control de incendios.