Casa de los horrores

Rescatan a una niña de 6 años de una jaula para perros, desnutrida, llena de llagas y con hipotermia

La menor declaró que la obligaban a comer comida para perro y que llegaron a dispararle en las piernas con una pistola de aire comprimido

Jacob Weight y Mimi Frost están acusados de haber maltratado y torturado a su hija de 6 años
Jacob Weight y Mimi Frost están acusados de haber maltratado y torturado a su hija de 6 añosTwitter

Parece que la maldad humana no tiene límites, pero de vez en cuando salta a la portada de los periódicos un caso que conmociona a la sociedad por la especial gravedad y crueldad de los hechos. es el caso de Jacob William Weight, de 37 años, y Mimi Ann Frost, de 33, que fueron detenidos en Pensilvania por maltratar de forma cruel a su hija de seis años.

La denuncia la realizaron los sanitarios el pasado 7 de enero, cuando acudieron al domicilio conyugal para atender a un menor que se había desmayado. Los padres no dejaron a los profesionales médicos entrar en la casa, pero las condiciones en las que se encontraba la niña hicieron saltar todas las alarmas. La menor fue trasladada de urgencia al Hospital Uniontown con el cuerpo lleno de llagas, desnuda, desnutrida, con sepsis (una infección en cadena en todo el cuerpo) y con hipotermia. Los dientes de la víctima también estaban agrietados y podridos

Cuando una patrulla del condado de Brownsville se personó en la casa, no esperaban encontrar una casa de los horrores. Excrementos de perro por el suelo, basura por todas partes, orina, un fuerte olor... Dentro estaban William y Mimi junto a sus cinco hijos. En mitad del salón estaba la prisión de la niña ingresada: una jaula para perros donde la encerraban cada noche, la ataban de pies y manos y la golpeaban.

Según relató uno de los hijos de la pareja, sus padres encerraban a su hermana por las noches y la golpeaban con una escoba. Según indicó, el desencadenante de todo fue cuando su hermana empezó a tener convulsiones y se desmayó cuando intentaba bañarla, lo que obligó a sus padres a llamar a emergencias.

El fiscal del distrito del condado de Fayette, Mike Aubele, espantado por la situación dijo que "a falta de una mejor manera de decirlo, ella había sido torturada en esa casa". De los seis niños que vivían en la casa, sólo la de seis años fue maltratada y torturada. Cuatro de los niños son hijos de la pareja y uno era sobrino del matrimonio, explicó Aubele. La menor nunca había recibido atención pediátrica y no había ido al colegio.

El sobrino le dijo a la policía que la madre le ataba las manos y los pies a la niña y se negaba a lavarla. Otro de los niños dijo que la pareja dejaba a la niña encerrada desnuda y sin comida y le decían que tenía que comerse sus propios desechos, bajo la amenaza de que sería castigada si trataba de huir para conseguir comida.

Según explicó Aubele, había pruebas de que algunos de los niños que vivían en la casa habían participado en los abusos. La vivienda, en la que vivían de alquiler, que fue descrita como "una casa de locos" albergaba también a 10 perros de raza pitbull y un gato, todos desnutridos también.

Pero las torturas infringidas sobre la niña fueron mucho más allá de lo descrito por sus hermanos y su primo. La niña, que está bajo supervisión de un terapeuta, confirmó que la obligaban a dormir en la jaula y a comer comida para perros. Sobre los maltratos y torturas que sufrió, indicó que su padre la golpeaba a menudo y que llegó a dispararle con una pistola de aire comprimido en las piernas.

"En el informe se afirma varias veces que ella podría haber muerto como resultado de este atroz abuso y negligencia y que si regresa a su entorno actual, es muy probable que muera a causa del abuso y la negligencia", informaron las autoridades.

A pesar de las evidencias, su padre negó los hechos y tras ser detenido le dijo a los medios de comunicación: "Soy inocente. Eso es todo. Nunca he encerrado a mi hija en una jaula".

El propietario de la vivienda, Tim Cole, consternado por la noticia de lo sucedido, describió a la niña como la "oveja negra" de la familia: "Siempre la trataron de manera diferente, pero nunca imaginé que pudieran estar maltratandola y sometiendola a todo tipo de abusos de puertas para adentro".

Desde la detención de los padres, Cole ha sido el encargado de cuidar a los perros, que han estado corriendo libres por la casa y destrozando todo lo que encontraban a su paso.

Cole y se dio cuenta de que los siete perros de la pareja corrían solos dentro de la casa. "Mi casa ha desaparecido. No entiendo por qué estos animales no fueron retirados hace días. Incluso los animales tienen algún tipo de derecho", lamentó.

Jacob William y Mimi Ann fueron ingresados en prisión sin fianza, acusados de agresión agravada, corrupción de menores, estrangulamiento y por poner en peligro el bienestar de los niños, y tendrán que comparecer ante la justicia el próximo 20 de febrero.