Disturbios

Segunda noche de disturbios en Nantes por la muerte de un joven delincuente

Decenas de coches y varios edificios fueron incendiados durante las protestas

Disturbios con la policía en Nantes (Francia) el martes / Foto: Efe
Disturbios con la policía en Nantes (Francia) el martes / Foto: Efelarazon

Once personas permanecen hoy detenidas en Nantes, en el oeste de Francia, por participar en la segunda noche de disturbios desencadenados tras la muerte de un joven delincuente por disparos de un agente en un control policial.

Once personas permanecen hoy detenidas en Nantes, en el oeste de Francia, por participar en la segunda noche de disturbios desencadenados tras la muerte de un joven delincuente por disparos de un agente en un control policial.

Decenas de coches y varios edificios fueron incendiados durante las protestas que se centraron en el barrio de Breil, donde el martes se registró el incidente en el que murió Aboubacar Fofana, de 22 años, y también se extendieron a los de Bellevue, Dervallières y Malakoff.

Fuentes de la investigación citadas por el canal «France 3» en su página internet señalaron que cuatro de los arrestados son menores de edad.

Los agentes antidisturbios lanzaron gases lacrimógenos contra grupos de jóvenes que en algunos puntos habían formado barricadas, y protegieron a los bomberos durante la extinción de los incendios.

La violencia en Nantes, una de las más prósperas de Francia, comenzó el martes cuando Aboubacar Fofana, buscado por la justicia, fue detenido cuando circulaba en coche en un control policial.

Según las fuerzas del orden, que tenían vigilado su vehículo por las sospechas de que realizaba operaciones de tráfico de estupefacientes, el joven dio una falsa identidad y para verificarla decidieron llevarlo a comisaría.

Fofana trató de huir dando marcha atrás con el vehículo y atropelló a un agente. Uno de sus compañeros disparó contra el joven que murió mas tarde en el hospital.

El primer ministro francés, Edouard Philippe, se desplazó a Nantes, donde condenó los disturbios y, en particular, los ataques contra los bomberos que intervenían para sofocar los incendios: «nadie puede comprender esos actos y todo el mundo debe condenarlos».

En una comparecencia junto a la alcaldesa, Johanna Rolland, Philippe precisó que la pasada noche hubo 19 arrestos, aunque sólo 11 de esas personas seguían en comisaría y manifestó su apoyo a los policías, los bomberos y los médicos que han trabajado en estos altercados. Además, anunció un reforzamiento de la presencia policial en la ciudad y en la región en los próximos meses.

También afirmó que «los ciudadanos deben saber, con la mayor transparencia, lo que pasó» en el control policial y subrayó el objetivo de restablecer el orden.

Rolland señaló que «la vuelta al orden es nuestra primera prioridad» y, más allá de tomar nota del anuncio de mayor presencia policial, insistió en que las fuerzas del orden deben tener más medios para investigar los tráficos delictivos. Efe