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Dos muertos y 49 heridos en un accidente en Córdoba
Un autobús se empotró contra un camión parado. El fuerte impacto provocó que este último penetrase hasta la primera fila de pasajeros
Un autobús se empotró contra un camión parado. El fuerte impacto provocó que este último penetrase hasta la primera fila de pasajeros
Eran las 02:57 de la madrugada cuando los Bomberos del Parque de Montoro, en Córdoba, recibían una llamada alertando de un grave accidente entre un autobús y un camión. Minutos antes, el 112 había recibido una llamada de aviso porque al camión, que transportaba frutas y verduras, acababa de reventársele una rueda y se le había roto la centralita eléctrica, por lo que no tenía luces de emergencia. Es entonces cuando los dos conductores del camión salen e intentan avisar a los vehículos con linternas, no les dio tiempo ni a poner el triángulo. Instantes después, un autobús de la compañía Daibus se empotraba contra el camión, tal y como relató ayer a LA RAZÓN uno de los once bomberos del parque de Montoro que auxiliaron a las víctimas.
En el siniestro, dos personas perdieron la vida y 49 pasajeros–de nueve nacionalidades– resultaron heridos, cuatro de ellos de gravedad. Los fallecidos son el conductor madrileño que llevaba el autobús que hacía la ruta Algeciras-Madrid, y un segundo conductor, de Jaén. Ambos llevaban más de 15 años haciendo esta línea», explicaron a este periódico desde la compañía Daibus.
Atrapados en los asientos
El accidente tuvo lugar en la autovía A-4 a la altura del kilómetro 361 en sentido Madrid. «A los cinco o diez minutos de hacer la parada técnica, que dura 45 minutos como mínimo, tuvo lugar el accidente», aseveraron desde Daibus.
A la espera de que la investigación permita esclarer a qué velocidad iba el autobús, todo apunta, según ambas fuentes, a que el conductor del autobús no vio el camión hasta que ya fue demasiado tarde, al no estar señalizado. Tras el choque, «el camión ‘‘entra’’ hasta la primera línea de asientos de pasajeros. Cuando llegamos había pasajeros saliendo del autobús por sus propios medios, ya que la puerta trasera se quedó abierta». Había seis personas atrapadas. «Los pasajeros de detrás del conductor, un hombre y una mujer de más de 60 años, quedaron atrapados por las piernas y presentaban fracturas abiertas, así como una chica que estaba detrás de ellos, pero a la que conseguimos sacar quitando la espuma del asiento y que se encontraba bien. En cuanto a los dos pasajeros que iban detrás del copiloto, uno de ellos quedó atrapado por las piernas, y presentaba fractura abierta y hemorragias. El pasajero que iba a su lado sufrió una amputación de brazo, pero logró salir por sus propios medios», relató el bombero.
En el caso de los conductores, ya nada se podía hacer por sus vidas. De hecho, para sacarlos, «los bomberos tuvieron que emplear una grúa para retirar el autobús hacia atrás y poder acceder a la zona».
Hacía menos de un año que Daibus había adquirido el autobús siniestrado. «Se compró en junio de 2015, por lo que aún no le había tocado pasar la ITV anual, pero sí las pruebas de mantenimiento que realizamos», aseveraron desde la compañía, tras añadir que ambos llevaban puesto el cinturón. Un extremo que fue confirmado, al menos en el caso del que iba al volante, por el bombero, ya que se lo tuvieron que cortar para poder sacar su cuerpo.
La prueba de alcoholemia que realizó la Guardia Civil al conductor del camión dio negativa.
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