Andalucía

Sánchez y Díaz, el encuentro del deshielo

Escenifican hoy una nueva etapa tras sus choques orgánicos, con la frustrada reforma del modelo de financiación de fondo

Pedro Sánchez y Susana Díaz mantienen hoy su primer encuentro institucional en la Moncloa (Foto: Manuel Olmedo)
Pedro Sánchez y Susana Díaz mantienen hoy su primer encuentro institucional en la Moncloa (Foto: Manuel Olmedo)larazon

Fue en marzo de 2015 cuando, al calor de un mitin y dirigiéndose directamente a Susana Díaz, Pedro Sánchez lanzó una profecía que hoy es una realidad: «Tú a San Telmo y yo a la Moncloa». La relación entre ambos dirigentes socialistas no ha hecho más que debilitarse hasta el punto de pugnar ambos por la secretaría general del partido en mayo de 2017. Sánchez volvió a tomar las riendas del PSOE y en junio de este año llegó a la Moncloa gracias a una moción de censura. Díaz, por su parte, se refugió en Andalucía y no ha tenido más remedio que mantener la cordialidad con el que ha sido su rival en incontables batallas orgánicas. Hoy se vuelven a ver las caras en el primer encuentro institucional que mantienen, él como presidente del Gobierno y ella como jefa del Ejecutivo andaluz. De esta manera, Díaz se convierte en la cuarta presidenta regional en ser recibida por Sánchez en la Moncloa –tras Íñigo Urkullu, Quim Torra y Alberto Núñez Feijóo– y en la primera del mismo partido.

Los roces, en el plano de las reivindicaciones, ya aparecieron poco después de la formación del Gobierno. El Ejecutivo, en boca de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero –una de las grandes defensoras de la medida en su época de consejera–, enterró el principal motivo de confrontación con el anterior gabinete de Mariano Rajoy: la reforma de la financiación autonómica. Díaz se empeñó en asegurar que el actual reparto hace perder a Andalucía 1.000 millones de euros al año. En definitiva, el modelo, aprobado precisamente con Rodríguez Zapatero en la Moncloa, «supone un agravio de unos 8.000 millones de euros» para la región. Sin embargo, Montero ha descartado la reforma para esta legislatura porque «no da tiempo», mostrándose abierta a realizar mejoras puntuales. Éste es uno de los asuntos que abordarán Sánchez y Díaz en el encuentro, una cita que «va a ser buena para Andalucía», tal y como auguró ayer el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, y que «se traducirá en medidas que beneficien a nuestra tierra».

Jiménez Barrios aludió al acuerdo «casi unánime» alcanzado en el Parlamento andaluz –se desmarcó Ciudadanos– para alcanzar «una financiación justa y los servicios públicos». Igualmente, valoró la convocatoria el pasado jueves del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), una reclamación «largamente demandada».

Díaz también planteará a Sánchez, según Jiménez Barrios, el impulso a la línea ferroviaria Algeciras-Bobadilla, el AVE a Granada o la construcción de diversas infraestructuras hidráulicas, especialmente en Almería. Otro puntal relevante del encuentro será el empleo, a tenor de las abultadas cifras de paro que soporta la región. «Es lo que más preocupa a los andaluces y a la Junta, y lo que más necesita Andalucía», subrayó el vicepresidente. En muchas ocasiones Díaz reclamó a Rajoy la puesta en marcha de un plan de empleo en consonancia con los desarrollados en otras regiones duramente lastradas por el paro, como Extremadura o Canarias. Otro asunto que abordarán ambos dirigentes será la Ley de Dependencia, puesto que «al final los andaluces estamos soportando más del 75 por ciento de su financiación».

La oposición, por contra, acoge con escepticismo la reunión. El vicesecretario de Organización del PP-A, Toni Martín, aseguró que el encuentro «no puede ser de nuevo una foto de otra oportunidad perdida para Andalucía». En la línea de lo que ha venido defendiendo Díaz, Martín recordó la reclamación de 4.000 millones adicionales para una región que se encuentra «infrafinanciada».

Muy pesimista se mostró también el líder de Ciudadanos en la región, Juan Marín, quien dudó de que la cita «traiga buenas noticias para Andalucía ni nada nuevo». En este sentido, aseguró que no sabe «si tendremos la suerte de que Sánchez nos dé alguna limosna para que nos callemos la boca en los próximos años». Por su parte, el coordinador regional de IU, Antonio Maíllo, reclamó a Díaz que «no suavice su discurso».