Valladolid

Alicia García sitúa el empleo como una herramienta clave para la mujer víctima

La consejera apela también al compromiso de todos para acabar con la violencia machista

Faustino Temprano, Alicia García, Germán Barrios y Cristina Antoñanzas, durante las jornadas
Faustino Temprano, Alicia García, Germán Barrios y Cristina Antoñanzas, durante las jornadaslarazon

La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Alicia García, defendió el empleo como la «herramienta más fundamental» para mejorar al situación de la mujer víctima de violencia de genero y apeló al compromiso de toda la sociedad para erradicar este problema. Así lo indicaba al participar en una jornada organizada por UGT, donde destacó las iniciativas puestas en marcha en los dos últimos años, como el programa «IO Empresas», los acuerdos con los agentes sociales que ha permitido contratar agentes de igualdad, el programa «Empleo Mujer» o las subvenciones a empresas y entidades en la contratación de las afectadas, que ha supuesto dar trabajo a un total de 37 personas.

Diferentes medidas

Uno de los aspectos innovadores ha sido el programa «IO Empresas Castilla y León», que cuenta con una línea de subvenciones de 1,4 millones hasta el 2020 para implantar diferentes medidas de igualdad, entre las que se encuentran protocolos contra el acoso sexual en el ámbito laboral.

Desde su puesta en marcha ha propiciado que 160 empresas y entidades hayan implantado diferentes medidas de estas características, el 98 por ciento de ellas han implantado protocolos contra el acoso sexual en el ámbito laboral.

Por su parte, la vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas, denunció que entre 2008 y 2015 sólo 49 hombres fueron condenados por acoso sexual en el ámbito laboral, de un total de 2.484 denuncias, lo que constata la dificultad para hacer frente a este maltrato por «miedo al despido». Es por ello que Antoñanzas ha insistido en que el pacto nacional contra la violencia machista que se debate en la actualidad debe incluir protocolos por acoso laboral y sexual en las empresas y que entren en la negociación de los convenios colectivos, con el fin de poder llegar a las mujeres que trabajan en pymes, donde no hay obligación de tener planes de igualdad y que son una mayoría en España.