Castilla y León

El nuevo Estatuto sumará todas las sensibilidades de la sociedad

Así lo defiende Silvia Clemente, tras entregar la Medalla de Oro de las Cortes a los castellanos y leoneses del éxodo

La presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, junto a los representantes de los castellanos y leoneses en el éxodo que recibieron la Medalla de Oro; Pedro Bello Díaz, Serbio Rabanillo y María del Mar Díaz
La presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, junto a los representantes de los castellanos y leoneses en el éxodo que recibieron la Medalla de Oro; Pedro Bello Díaz, Serbio Rabanillo y María del Mar Díazlarazon

Las Cortes regionales se llenaron para celebrar, como se merece, el XXXIV Aniversario del Estatuto de Autonomía y para homenajear, en esta ocasión, a los castellanos y leoneses del éxodo con la entrega de la Medalla de Oro de la institución.

Las Cortes regionales se llenaron para celebrar, como se merece, el XXXIV Aniversario del Estatuto de Autonomía y para homenajear, en esta ocasión, a los castellanos y leoneses del éxodo con la entrega de la Medalla de Oro de la institución.

La presidenta del Parlamento autonómico, Silvia Clemente, en un discurso realista, cercano y sin rehuir de la actualidad, apostó por que la reforma de la norma básica de nuestra Comunidad incorpore las «diferentes sensibilidades» de la sociedad.

Aunque consideró que la renovación del Estatuto no es prioritario para esta legislatura, e indicó que «todos debemos participar en la reflexión sobre la capacidad que tiene la norma para dar respuesta a las demandas y necesidades reales de los ciudadanos».

Amplio acuerdo

Asimismo, recordó que las reformas siempre han nacido «de la negociación y de un amplio acuerdo sobre el qué y el cómo de la modificación». «Cuando no ha sido así se han visto abocadas al fracaso», añadió.

La presidenta de las Cortes aseguró que no debe excluirse la posibilidad de que el Estatuto sea modificado para dar una respuesta «más eficaz» a las necesidades de la sociedad, si bien dijo que esto no lo debe convertir en el protagonista de la actividad parlamentaria.

«No en cualquier situación es necesaria la reforma del Estatuto de Autonomía», subrayó y explicó que los gobiernos de las comunidades, de diferente signo político, están demostrando la capacidad de sus respectivos estatutos para desarrollar sus políticas sin necesidad de abordar la reforma de los mismos. «En todo caso, el Estatuto de Autonomía de Castilla y León es y ha de seguir siendo el punto de encuentro sobre el que debemos seguir trabajando juntos para construir un futuro mejor», afirmó Silvia Clemente.

Además, la presidenta destacó que la «clave» de la democracia constitucional es la «confianza» entre representantes y representados puesto que determina la legitimidad social.

«Es evidente que el Parlamento del siglo XXI no puede sobrevivir si se distancia de la realidad social y no mantiene viva su conexión con la ciudadanía; si no es capaz de reaccionar y darse cuenta de que estamos ante una gran oportunidad para hacer frente a los nuevos retos que demandan asambleas legislativas más cercanas a los ciudadanos y abiertas a su participación», afirmó.

Por ello, Clemente declaró que las Cortes de Castilla y León están impulsando diferentes iniciativas para acercar el Parlamento a los ciudadanos y para favorecer que la institución tenga una presencia «activa» en todo el territorio. «Queremos que el conjunto de la sociedad de Castilla y León se identifique con esta institución; facilitar un mayor conocimiento del debate político entre los ciudadanos y favorecer que sus propuestas y aportaciones puedan llegar al trabajo diario de sus representantes», señaló.

También, Silvia Clemente resaltó el papel de los emigrantes y mostró su solidaridad con los refugiados al demandar «la urgencia de garantizar para todos ellos el necesario respeto de los Derechos Humanos».

Respecto y convivencia

La presidenta de las Cortes recordó que nuestra Comunidad, a lo largo de su historia, ofreció al mundo numerosos ejemplos de respeto y convivencia entre culturas diversas y «ha sabido forjar un profundo sentido de solidaridad y de acogida».

Por último, Silvia Clemente agradeció a los emigrantes el cariño que siempre han dedicado a Castilla y León.

Por su parte, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, consideró que aquellos que tuvieron que marcharse de su tierra en circunstancias «bien complicadas» son un «ejemplo de amor por encima de todo» puesto que, destacó, demuestran que tienen un «corazón esponjoso y generoso» capaz de compatibilizar tantos sentimientos, pero entre ellos, el que mantienen vivo por nuestra Comunidad.

Emocionados y con casi lágrimas en los ojos recibieron el reconocimiento los representantes de los castellanos y leoneses del éxodo. El argentino Pedro Bello Díaz resaltó la «labor altruista» que el colectivo realizó en tierras argentinas, «trabajando horas con una gran desafío, que las nuevas generaciones continúen dando vida a estas casas, que se mantenga la cultura con los cuerpos de baile, profesores, coros, deportes que la juventud pueda realizar. Es un desafío para esta diligencia que hoy dirige esta casa».

Por su parte, el cubano Sergio Rabanillo afirmó que «queremos que nuestros hijos y nietos sientan que las fiestas de aquí son también las suyas y que los lazos sean cada vez más fuertes». Consideró que es la Medalla» de los que a cientos de kilómetros decidieron buscar su vida», y explicó que otros «la viven con igual fuerza, aunque estén más cerca, pero la lejanía del continente americano quizás se vive con más añoranza».

Por último, María del Mar Díaz, en nombre de Pedro José Díez y Díez, de la Casa de Castilla y León en México, recalcó que es un «orgullo» que se reconozca a los emigrantes, justo este año que se cumplen 40 años de las relaciones entre el país azteca y España. Para la casa leonesa, indicó que «es importante por el recuerdo a los tradiciones, a la Virgen del Camino y su añoranza».