Cataluña

Convergència deja en manos de la militancia si cambia de nombre

Sopesa también consultar a las bases si hay primarias para elegir cargos y candidatos

Artur Mas, en la imagen charlando con Carles Puigdemont, está centrado en el proceso de refundación del partido
Artur Mas, en la imagen charlando con Carles Puigdemont, está centrado en el proceso de refundación del partidolarazon

Ser CDC o no ser CDC esa es la cuestión que se plantea Convergència desde que el «alma mater» del partido, Jordi Pujol, confesó que evadió una fortuna en el extranjero. De eso hace ya un año y medio. Ser CDC porque «estamos orgullosos de una marca que ha gobernado Cataluña durante 23», vino a defender Josep Rull en su última intervención como secretario de organización. No ser CDC porque los casos de corrupción que asedian a la marca convergente no son un buen reclamo para atraer votos. Tras pasarse un tiempo en el diván del psicoanalista divagando sobre la cuestión, Convergència decidió ayer, tras la reunión semanal del comité ejecutivo nacional, que consultarán con personas externas la percepción que hay de las siglas «CDC». También preguntará a la militancia.

Ahora que los partidos emergentes han puesto de moda las primarias, asambleas y la política de forjada de abajo hacia arriba, Convergència planea dar protagonismo a las bases su proceso de refundación. Un trabajo en el que está concentrado Artur Mas desde que dejó la presidencia de la Generalitat en manos de Carles Puigdemont. La portavoz de CDC, Marta Pascal, explicó que «nuestra voluntad es hacer un proceso de refundación con mentalidad abierta, con posibilidad de habalr sobre cualquier tema y revisar todo aquello que se tenga que revisar con el objetivo último de ensanchar la base de los que apuestan por el proceso soberanista». Objetivo codiciado por ERC, la CUP, incluso por el partido de Ada Colau. No en vano, el peso de la base de un partido es proporcional a su peso en las urnas.

Pascal informó también de que el sábado, CDC celebra un Consell Nacional que marcará el «inicio» del proceso de refundación que culminará, si no hay elecciones generales que obliguen a cambiar de agenda, el primer fin de semana de junio. Como se quiere implicar a la militancia, el sábado no se decidirá sobre las primarias. La idea es que además de elegir al secretario general, debata sobre la estructura territorial y sectorial de la formación. Todavía no está claro quiénm se postulará para el puesto de secretario general, que ocupaba Oriol Pujol antes de abandonar el partido.

CDC se prepara para renovarse con Mas de director de orquesta. Para arrancar este proceso se han cambiado piezas. Después de que Francesc Sánchez se haya centrado en la organización, Jordi Cuminal lo sustituirá como responsable de comunicación.